La economía española muestra una notable fortaleza. El Banco de España ha elevado su previsión de crecimiento para este año en dos décimas, hasta el 2,6%, gracias a un comportamiento mejor de lo esperado durante la primavera y un verano «robusto». Sin embargo, el optimismo es cauto: el organismo avisa de que el país se enfrenta a un escenario «ligeramente más adverso» en los próximos meses, por lo que mantiene sin cambios sus proyecciones para 2026 y 2027.
¿Por qué mejora la previsión de este año?
El principal motor de esta revisión al alza ha sido el «dinamismo» del consumo privado y la inversión, que han compensado la debilidad del consumo público y del sector exterior.
La economía española creció un 0,7% en el segundo trimestre —cinco décimas por encima de la media europea— y se espera que mantenga un ritmo fuerte de entre el 0,6% y el 0,7% en el tercero. Esta «notable capacidad de resiliencia», según el Banco de España, sitúa la nueva previsión muy en línea con la del Gobierno, que la ha fijado en el 2,7%.
La advertencia para el futuro
A pesar de las buenas noticias actuales, el supervisor explica que el encarecimiento de la energía y un entorno internacional más complejo le impiden ser más optimista a largo plazo.
Por este motivo, las tasas de crecimiento proyectadas para 2026 y 2027 se mantienen en el 1,8% y el 1,7%, respectivamente.
El informe del Banco de España en 3 claves
1. Crecimiento al alza ? El Banco de España mejora la previsión de crecimiento de la economía española para este año, elevándola hasta el 2,6%. La razón: un comportamiento mucho más fuerte de lo esperado en los últimos meses.
2. Un motor resistente ? La clave de esta mejora está en la «notable resiliencia» del país. El consumo de los hogares y la inversión de las empresas se han mantenido muy dinámicos, impulsando la actividad económica por encima de la media europea.
3. Advertencia para el futuro ?? A pesar del optimismo actual, el organismo se muestra cauto. El aumento del precio de la energía y un entorno internacional más complejo (los aranceles de Trump a casi todo el mundo) dibujan un escenario «más adverso», por lo que las previsiones para 2026 y 2027 se mantienen sin cambios.





















