La Diputación de Salamanca negó este jueves categóricamente “inacción o encubrimiento” en un presunto acoso sexual sufrido por una alumna de la escuela de tauromaquia de la institución provincial, y en otro caso de bullying que habrían denunciado los padres de otro alumno.
La Diputación afirma haber gestionado estos hechos, una vez conocidos, con “la máxima diligencia y responsabilidad” dentro del marco legal que ampara a las partes implicadas.
Una menor de 13 años habría sido víctima de un presunto acoso sexual por parte de dos compañeros, y otro alumno, también menor, habría emprendido medidas legales con motivo de un presunto maltrato psicológico continuado por parte de los profesores.
En relación con el primer caso mencionado, la Diputación aseguró que los hechos ocurrieron “fuera del horario y de las instalaciones de la escuela”, y en el mismo momento en que el equipo directivo tuvo conocimiento de la situación, “se adoptaron de manera inmediata las medidas oportunas”. Como medida preventiva, la institución decidió separar a los alumnos implicados para que no coincidieran en las clases, durante los días restantes hasta la finalización del curso. Asimismo, se abrió un expediente administrativo por parte de la Diputación de Salamanca para recabar toda la información de ambas partes.
La Diputación de Salamanca aguarda a la resolución judicial de estos procedimientos. “La Escuela de Tauromaquia no puede, ni debe, vulnerar los derechos de ninguno de los implicados. No existe en la actualidad ninguna medida judicial ni administrativa que justifique la expulsión de los alumnos, y proceder a ello supondría un menoscabo grave de los derechos fundamentales de una de las partes”, recalcó la institución, asegurando que actuará “siempre conforme a la ley” y a las resoluciones judiciales que puedan dictarse, “respetando en todo momento la presunción de inocencia”.
En cuanto al segundo asunto aludido, referido a un supuesto caso de “’bullying docente”, la Escuela de Tauromaquia negó “cualquier comportamiento inadecuado o vejatorio por parte del profesorado”. “Estas acusaciones responden al descontento de un alumno y de su progenitor tras las decisiones técnicas adoptadas por el profesorado, relativas a la preparación y nivel de los alumnos para participar en clases prácticas, actividades que, por su propia naturaleza, implican riesgo físico y exigen criterios estrictos de seguridad y capacitación”, explicó la institución.
En último término, la Escuela de Tauromaquia de la Diputación de Salamanca afirmó que mantiene su “compromiso absoluto” con la formación, la seguridad y el bienestar de todos sus alumnos, actuando siempre bajo los principios de “respeto, legalidad y transparencia”.





















