La Audiencia Provincial de Madrid ha corregido este jueves al juez Juan Carlos Peinado y ha anulado su decisión de investigar en una pieza separada a la asesora de Begoña Gómez por un presunto delito de malversación. En su resolución, el tribunal considera que esta línea de investigación debe continuar, pero dentro del procedimiento principal en el que también se investiga a la esposa del presidente del Gobierno por tráfico de influencias.
En su auto, la Audiencia da la razón parcialmente a los recursos presentados por Begoña Gómez y su asesora, Cristina Álvarez. El tribunal argumenta que los presuntos delitos de tráfico de influencias y malversación están «intrínsecamente unidos», lo que impide separarlos en causas distintas.
La decisión del juez de abrir una pieza separada —que abría la puerta a un juicio con jurado popular— es calificada por la Audiencia de «prematura e inmotivada desde el punto de vista fáctico, normativo y procedimental».
El foco de la investigación
El tribunal aprovecha para aclarar el alcance de las pesquisas. Subraya que «no se investiga la legalidad del nombramiento» de la asesora, ya que su puesto se considera necesario por motivos de protocolo y seguridad. La investigación, precisa el auto, se centra en una «posible extralimitación de las funciones del cargo». Es decir, en si la asesora, desde su puesto en Presidencia, participó en «actuaciones del exclusivo interés personal» de Begoña Gómez.
Además, en otra resolución, la Audiencia Provincial reprocha al juez Peinado no haberse pronunciado sobre la petición de varias testificales que la defensa de Gómez solicitó en noviembre del año pasado, y le ordena que resuelva la cuestión «sin dilación».
