La Agrupación Nacional de Administradores de Loterías (Anapal), propone este martes aumentar la dotación del primer premio del Sorteo Extraordinario de Navidad de los actuales 400.000 a 500.000 euros por décimo, como “medida estrella para recuperar el atractivo del sorteo y reforzar su peso simbólico”.
El presidente de Anapal, Borja Muñiz, recuerda que hace 14 años que se mantiene el mismo premio Gordo de 400.000 euros, “solo que antes suponía un poder adquisitivo mucho mayor, ya que permitía comprar casi dos casas, mientras que hoy ya no da casi ni para un piso”.
Según el INE, la variación del IPC desde diciembre de 2011 hasta octubre de 2024 ha sido de un 26%, porcentaje en el que han subido los precios desde entonces. “De esta manera, añadiendo ese porcentaje a los 400.000 euros para que El Gordo se actualizase conforme a la inflación, el primer premio de la Lotería Nacional debería rondar los 500.000 euros, es decir, el premio debería aumentar en 100.000 euros”, explican desde Anapal. “Queremos que el Gordo sea un premio que haga cumplir sueños y no sólo sirva para tapar agujeros”, señala Muñiz.
Esta propuesta es una de las principales conclusiones de la encuesta sectorial realizada por la asociación y en la que han participado de cerca de 300 administradores de lotería de toda España, que han aportado una radiografía del sector basada en más de 9.300 respuestas.
Revisión del modelo
Uno de los aspectos más alarmantes del estudio, presentada el martes en Madrid, se centra en la campaña de Navidad, pilar absoluto de la actividad de los administradores de lotería y el que cuenta con la comisión más baja de todos los sorteos.
A este respecto, Muñiz expone de los 103 sorteos de Lotería Nacional al año, en 102 obtienen una comisión del 6% bruto. Sin embargo, en el de Navidad, “la comisión baja al 4 y medio”, una penalización que “afecta directamente al sorteo en el que más trabajan, invierten y recursos utilizan”.
Este aumento del Gordo en un 25% tendría que venir acompañado de una subida del precio del décimo, que permanece congelado desde 2002. “¿Qué producto o servicio ha mantenido su precio estable durante las dos últimas décadas? Ninguno”, recuerda Muñiz.
Pérdidas para los profesionales
Los gastos que genera el sorteo se traducen en pérdidas para los loteros. Además, desde Anapal se ha apuntado a la presión del canal digital como otra de las causas de la baja rentabilidad. “El Sorteo de Navidad ya no garantiza rentabilidad. La red de ventas está sosteniendo el juego público a costa de su viabilidad”, asegura el vicepresidente de Anapal, Jorge Anta.





















