Colocar de forma correcta el equipaje durante un viaje en avión puede garantizar un vuelo más cómodo y seguro. Ya sea por prisas o por costumbre, los pasajeros tienden a dejar bolsas y bultos pequeños en la parte superior de sus asientos, nada más embarcar. Sin embargo, ese no es su lugar ideal.
Esa zona está destinada a maletas grandes, y esa costumbre poco cívica hace que quienes portan equipaje de mayor tamaño se queden sin a penas sitio para depositarlo. Lo ideal es instalar las bolsas, maletines o mochilas pequeñas bajo el asiento delantero (siempre y cuando el viajero no esté sentado en una fila de la salida de emergencia). Esta es la recomendación que hacen diversas aerolíneas, como es el caso de Lufthansa, cuyos consejos recoge el medio internacional especializado en viajes internacionales Travel + Leisure.
Poner los bultos teniendo en cuenta esta consideración hace que el proceso de embarque sea más cómodo, ordenado y rápido.
Tampoco hay que olvidar que los objetos pesados, como las maletas grandes, no pueden ubicarse sobre los asientos, por los riegos que ello puede conllevar durante el vuelo (en caso de turbulencias, por ejemplo). En los asientos solo se permite poner enseres ligeros, como alguna prenda de ropa o una pequeña almohada.
