Centros municipales de la tercera edad

Un grupo de jubilados, en la Plaza de la Concordia. (Foto: Javier Pérez) ARCHIVO.

En terrenos adquiridos a los trinitarios se construyó otro centro para dar servicio a Pizarrales, Carmen, Vidal y San Bernardo. Compramos los terrenos, 1.025 metros cuadrados, por 64 millones de pesetas, e instalamos un Centro Polivalente de Servicios Sociales, cuyo proyecto realizó el arquitecto municipal Fernando Bueno. Se construyó otro similar en la calle La Parra, detrás de la Gran Vía. El Ayuntamiento y la Consejería de Bienestar Social de la Junta corrieron con los gastos.

El seis de junio de 1981, comenzó a funcionar la Casa Municipal de la Tercera Edad de Garrido. Se ubicó en unas aulas abandonadas del colegio San Mateo, conocidas en el barrio como El Mercadillo. Tenía capacidad para 80 personas. La dotamos de televisión, que en aquellos tiempos seguía siendo un lujo, sala de estar, sala de juegos, salón para actividades culturales, despacho para la trabajadora social, botiquín, patio de entrada amplio y muy concurrido en los días soleados, y servicios.

En los inicios trabajó para sacarlo adelante el matrimonio Pereña. Se inauguró con más de 600 socios, poniéndose el límite en los 800. Se acogían ancianos de Garrido y Puente Ladrillo, barrio, este último, que todavía no tenía este tipo de instalaciones.

A principios de 1984 se realizaron obras en la Casa de la Tercera Edad de Garrido por importe de dos millones de pesetas, afectaron al salón de actos para que cumpliera con las normas de seguridad.

El Servicio de Acción Social, en contacto con los barrios de la ciudad, detectaba los problemas de los ciudadanos. Colaboraban con él más de cuatro mil personas de los distintos gabinetes, asociaciones de vecinos, escuelas de padres y personas individuales.

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