Ceoe Cepyme Salamanca valora positivamente la decisión del Gobierno de ampliar los plazos de implantación del sistema Verifactu, una medida que la organización considera necesaria tras constatar que una parte muy significativa del tejido empresarial salmantino, formado mayoritariamente por pymes, microempresas y autónomos, “no tendría capacidad técnica ni temporal para adaptarse” antes del 1 de enero de 2026.
La confederación recuerda que “las pequeñas y medianas empresas de la provincia han mostrado en todo momento su voluntad de cumplir con las nuevas obligaciones”, pero “la falta de tiempo, la complejidad técnica y el alto volumen de adaptaciones necesarias hacían inviable una puesta en marcha inmediata sin provocar perjuicios serios en su actividad”.
En los últimos meses, la confederación salmantina ha venido impartiendo sesiones informativas y cursos específicos sobre Verifactu en la capital y en distintos puntos de la provincia. Esta labor de acompañamiento ha permitido detectar de primera mano las dificultades reales de adaptación: f”alta de tiempo, necesidad de desarrollos complejos y una carga tecnológica que muchas pequeñas empresas no pueden asumir en plazos tan reducidos”.
Los datos y consultas recogidos por la confederación señalan que numerosos negocios, especialmente en sectores como comercio, hostelería, alimentación y servicios, debían afrontar cambios en su software, nuevas integraciones, módulos adicionales o renovaciones completas de sistemas que no podían resolverse en los plazos indicados. A ello se sumaba el riesgo de “saturación técnica en diciembre, en plena campaña navideña y con falta de personal”.
“Las pymes quieren cumplir, pero para muchas era simplemente imposible hacerlo en tiempo y forma. La ampliación del calendario permite trabajar con rigor, adaptarse correctamente y evitar que una obligación técnica se convierta en un problema para miles de negocios”, añaden.
Ceoe Cepyme Salamanca destaca además la “necesidad de reforzar la información y la claridad normativa, ante la confusión existente entre las obligaciones de Verifactu y la futura factura electrónica”, especialmente entre empresas pequeñas que carecen de departamentos técnicos o asesorías internas.
“Son obligaciones distintas y, para muchos empresarios, difíciles de entender sin una información clara y progresiva”, señalan desde la confederación, que insiste en la importancia de seguir reforzando la divulgación y el apoyo técnico.
Asimismo, reitera su compromiso de colaborar con las instituciones para avanzar hacia una implementación “eficaz, proporcionada y realista”, que tenga en cuenta la estructura empresarial de Salamanca: “un territorio con miles de autónomos y microempresas que requieren acompañamiento, certidumbre y un marco normativo asumible para poder seguir siendo competitivas”, destacan.





















