¿Cuánto hacen el amor los salmantinos?

Los datos se sitúan cerca del promedio nacional, y es algo más de lo del sábado por la noche. Un estudio revela las fantasías preferidas y las prácticas más habituales. Sin sorpresas
Una pareja, en un paso de cebra. Foto: Pixabay.

Este lunes publicamos la primera parte sobre la infidelidad en Salamanca, que completamos ahora con una nueva entrega sobre los hábitos sexuales de los salmantinos. El sex shop Diversual realizó el pasado mes de mayo un Estudio sobre hábitos sexuales en España, en el que se desvelan algunos aspectos provincializados.

El informe ha sido diseñado y analizado por las sexólogas del equipo Diversual, Lucía Jiménez y Bárbara Montes, quienes han sido clave en la formulación de las preguntas y en el análisis detallado de los resultados.

Un aspecto que tradicionalmente ronda estos estudios es conocer la frecuencia de las relaciones íntimas. La media española de días en que se practican relaciones sexuales con otra persona se sitúa en los 6,3 días al mes, pero ¿qué provincia practica más? ¿Y la que menos…?

La provincia española que más relaciones sexuales practica con otra persona es Teruel, con una media de 8,1 días al mes. La provincia que menos relaciones sexuales practica es Girona, con una media de 5,00 días al mes. En Salamanca sale una media de 7,3 al mes, o sea, un poco más que lo del sábado por la noche y una frecuencia que much@s querrían.

Este es el mapa de la frecuencia del coito:

Prácticas más frecuentes

El 88,8% de las personas encuestadas incluye habitualmente el sexo oral en su vida sexual. La segunda práctica más común es la masturbación en pareja, con un 71,6%. En el otro extremo se encuentran las prácticas menos habituales, como los intercambios de pareja o los tríos con solo un 2,4% de participación.

El lugar favorito del 73,0% de las personas encuestadas es el dormitorio, seguido del salón en el 11,7% de los casos y de los hoteles con el 6,2%.

El orgasmo

Las personas que participaron en la encuesta alcanzan el orgasmo en un 75,4% de sus encuentros sexuales, el 73% en Salamanca.

En el caso de las personas que se identifican con el género masculino, el 86,1% afirma llegar al orgasmo cuando tiene relaciones sexuales con otra persona, siendo más frecuente en la franja de edad entre los 35 y 44 años, con un 88,9%.

Las personas con identidad de género femenino tienen un orgasmo el 65,9% de las veces que mantienen relaciones sexuales con otra persona. El porcentaje más alto de orgasmos en este caso se encuentra a partir de los 65 años, con un 81,3% de las veces.

Masturbación

Las personas encuestadas alcanzan el orgasmo a solas un 88,4% de las veces, ya sea con juguetes eróticos o sin, frente al 75,4% de las veces que lo alcanzan cuando mantienen relaciones en pareja. Si fuera verdad eso que decían antaño, todos ciegos.

En el caso de quienes se identifican con el género masculino, el 90,4% asegura llegar al orgasmo durante la masturbación, comparado con el 86,1% de las veces cuando mantienen relaciones sexuales con otra persona.

Por su parte, las personas que se identifican con el género femenino alcanzan el orgasmo el 86,6% de las veces cuando disfrutan de la masturbación a solas, y este porcentaje baja al 65,9% en relaciones sexuales con otra persona.

Fantasías

La fantasía que más se repite es hacer un trío, elegida por el 57,7% de las personas encuestadas. La fantasía menos frecuente es la de ver a su pareja teniendo sexo con otra persona, elegida solo por el 20,0%. Según la encuesta, lo que más pone a los salmantinos (sin tener en cuenta el dormitorio) es hacerlo en un lugar público.

La fantasía que más se repite entre las personas identificadas con el género masculino son: en primer lugar, hacer un trío (66,6%); en segundo, tener sexo con una persona conocida (57,5%); y en tercero, mantener relaciones en un lugar diferente al dormitorio (52,5%). La de tener sexo con alguien del mismo género siendo heterosexual es elegida por el 13,9%.

En el caso de las personas con identidad de género femenino, las fantasías más repetidas son: ser dominadas sexualmente (59,2%), tener sexo en un lugar fuera del dormitorio o la cama (54,9%) y hacer un trío (49,2%). La opción menos escogida es ver a su pareja teniendo relaciones con otra persona (12,0%).

La fantasía más común en general es hacer un trío, siendo la opción predominante en 28 provincias como Teruel (83,3%), Ávila (75,0%) o Zaragoza (67,9%).

Mantener relaciones en un lugar distinto al dormitorio es la segunda fantasía más común, liderando en 12 provincias, entre ellas Lugo (64,2%(, Badajoz (62,3%) y Vizcaya (60,0%).

La fantasía de ser dominados sexualmente encabeza en 6 provincias, destacando Huesca (70,3%), Zamora (66,6%) y Ciudad Real (58,8%).

La fantasía que más personas han llevado a cabo es tener relaciones sexuales en un sitio diferente al dormitorio o la cama, con un 69,3%. Le sigue tener sexo en un lugar público, con un 56,3%. Por el contrario, las fantasías menos realizadas son tener sexo con una persona famosa, con solo un 1,8%, y realizar un intercambio de pareja, con un 4,1%.

Las nuevas tendencias en 2025, según Ashley Madison

Tendencia 1: La no-monogamia consensuada

El informe destaca que las parejas están adoptando la denominada «no-monogamia declarada» (NMD), que permite explorar relaciones externas con el conocimiento y, en ocasiones, la participación de la pareja principal. De las personas encuestadas, el 48% indicó que esta práctica fue una decisión mutua, mientras que el 15% reportó que la NMD mejoró la relación con su pareja principal. Este fenómeno, que anteriormente se encontraba en los márgenes sociales, está comenzando a consolidarse como una alternativa viable desde el inicio de las relaciones. En particular, el 45% de los participantes afirmó haber acordado este tipo de relación antes de formalizar su vínculo.

Tendencia 2: Nuevas generaciones lideran el cambio

En términos generacionales, los datos son reveladores: el 51% de los integrantes de la Generación Z española se muestran dispuestos a explorar relaciones no monógamas. Esta apertura está acompañada de un cambio cultural que refleja una disminución en el estigma asociado a la infidelidad, considerada cada vez más como un síntoma de necesidades insatisfechas y menos como una transgresión irreparable. En la población general española, el 23% de las mujeres y el 30% de los hombres encuestados señalaron que estarían dispuestos a perdonar una infidelidad, indicando una mayor comprensión de las complejidades emocionales de las relaciones modernas.

Tendencia 3: No-monogamia – un espectro en lugar de un modelo binario

Los resultados también sugieren que la no-monogamia está dejando de ser percibida como una opción binaria. Más de un tercio (38%) de los miembros Ashley Madison señaló que inicialmente aprendieron que la monogamia era la única opción, pero descubrieron otras alternativas más alineadas con sus necesidades emocionales y relacionales. Este cambio conceptual ha llevado a la popularización del “espectro de la monogamia”, un marco que permite a las personas situarse en un continuo de preferencias, desde relaciones completamente cerradas hasta modelos completamente abiertos.

Tendencia 4: Autenticidad en el centro de las relaciones modernas

La autenticidad se perfila como el valor más buscado en las relaciones contemporáneas. Según los datos de Ashley Madison, casi una de cada cuatro mujeres indicó que la monogamia tradicional no satisfacía sus expectativas y optaron por explorar otras opciones. Esta tendencia es especialmente evidente entre la Generación Z, que representó el 40% de los nuevos registros en la plataforma durante el último año. Este grupo prioriza conexiones auténticas y alineadas con sus valores personales, marcando un cambio generacional que desafía los paradigmas establecidos.

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