El Sindicato Médico (CESM) ha llamado a los facultativos de toda España a secundar una huelga los próximos 9, 10, 11 y 12 de diciembre. Esta movilización, que afectará a hospitales y centros de salud (con impacto confirmado en áreas como Salamanca), nace del profundo malestar del colectivo con el borrador del nuevo Estatuto Marco que prepara el Ministerio de Sanidad. El colectivo ya fue a la huelga el pasado 3 de octubre, y protagonizó una concentración en Madrid el 15denoviembre.
El motivo del conflicto: la falta de diferenciación
El núcleo de la protesta no es una cuestión de privilegios, sino de especificidad profesional. El sindicato denuncia que la nueva normativa trata por igual a todas las profesiones sanitarias, ignorando la realidad única de los médicos: su elevada responsabilidad civil y penal, la exigencia de su formación y cargas laborales excepcionales, como las guardias obligatorias. Por ello, reclaman un marco jurídico específico que reconozca estas singularidades, en lugar de diluirlas en una normativa generalista.
La postura del Ministerio
Representantes del sindicato aprovecharon un acto oficial para abordar a la ministra de Sanidad, Mónica García, y exigir una reunión urgente que desbloquee la situación.
Por su parte, García ha defendido la reforma, asegurando que el texto se ha elaborado con diálogo y que introduce avances tangibles, como la reducción de jornadas, la consideración de autoridad pública ante agresiones, el derecho a la desconexión digital o la exención de guardias para mayores de 55 años.
No obstante, la ministra ha pedido realismo: sostiene que muchas de las demandas sindicales exceden las competencias de esta ley específica, argumentando que al Estatuto «no se le pueden pedir cosas que no son de su amparo», del mismo modo que no se pide a un especialista funciones ajenas a su campo.
Las reivindicaciones
Las demandas de los médicos se concretan en una serie de puntos clave que buscan «dignificar la profesión y, en última instancia, mejorar la calidad de la atención al paciente»:
Estatuto propio: Por un ámbito propio de diálogo y negociación en los que se aborden las condiciones laborales y retributivas de la profesión médica y facultativa.
Reclasificación profesional: A1+ y una clasificación profesional acorde al nivel de funciones, de formación y de responsabilidad de nuestro colectivo acompañada de la retribución correspondiente.
Profesión médica:
Por el reconocimiento como profesión de riesgo por la especial penosidad.
Complemento de destino correspondiente a un nivel 28.
Pagas extraordinarias íntegras con todos los complementos.
Eliminación de la movilidad forzosa.
Régimen de incompatibilidades igual que el resto de empleados públicos.
MIR: Mejoras retributivas y garantía de derechos laborales durante el periodo de formación sanitaria especializada.
Conciliación familiar:
Protección especial en casos de violencia contra el médico o facultativo.
Complementación al 100% de las retribuciones en todos los casos de adaptación por motivos de salud y conciliación familiar.
Jornada:
Jornada de mañana y 35 horas/semanales.
Que cumpla normativa europea de jornada máxima con cómputo semanal.
Todo exceso de jornada debe ser voluntario, retribuido mínimo como la hora ordinaria máxima y se computará a efectos de jubilación.
Hora trabajada, hora cotizada, hora computada.
Descansos obligatorios, que computen como jornada y acordes a los excesos de jornada.
Regulación de las guardias localizadas considerando los periodos de localización como jornada efectivamente trabajada.



















