Dicen que los premios literarios dan prestigio, pero en el caso de Juan del Val, el Premio Planeta 2025 ha servido, literalmente, para poner ladrillos. El escritor y su mujer, Nuria Roca, están dando los últimos retoques a su nueva residencia en Candeleda (Ávila), una espectacular finca en plena sierra de Gredos que se ha convertido en el gran proyecto familiar del año.
La propia Nuria Roca ha ido desvelando en redes sociales la evolución de la obra, supervisada por el reconocido interiorista Pepe Leal. Las visitas a la construcción se han convertido en un evento familiar al que se ha sumado incluso Ruth, la hermana de la presentadora, desplazada desde Valencia para ver cómo toma forma el refugio.
«Si ya está gastado»
La anécdota sobre la financiación del inmueble surgió, como no podía ser de otra manera, bajo los focos de El Hormiguero. Tras alzarse el pasado octubre con el galardón mejor dotado de las letras españolas —un millón de euros— gracias a su novela Vera, la pregunta era obligada: ¿en qué se gastarían el dinero?
Lejos de hablar de inversiones financieras o viajes exóticos, la respuesta de Nuria Roca fue de un realismo aplastante. Cuando le preguntaron si usarían el dinero para «tapar agujeros», la presentadora fue clara: «Dije: ‘Si ya está gastado’. Solo visualizaba la obra», admitió entre risas, dejando claro que el presupuesto de la casa de Gredos ya tenía asignado el cheque antes incluso de cobrarlo.
Ante tal despliegue de sinceridad sobre el destino de los fondos, Juan del Val cerró el tema lanzando una petición en directo a su jefe, Pablo Motos: «Espero que no me despidas». Con la casa casi terminada y el premio en el bolsillo, parece que el «polémico» colaborador tendrá al menos un lugar idílico donde retirarse a escribir… o a descansar de las facturas de la obra.
