El mejor aperitivo de Castilla y León está en Valladolid. El establecimiento Vayco ha sido coronado como ganador de la comunidad autónoma en el ‘Campeonato de España. El Aperitivo Perfecto’, para cuya final se clasificó junto a otros 16 aspirantes elegidos entre más de un centenar de todo el país. Unos mejillones gallegos en salsa de vermú le han valido el título autonómico.
Al certamen, que arrancó el 14 de noviembre y se prolongó hasta el 30 de ese mismo mes, concurrieron más de un centenar de participantes de todos los rincones de España con propuestas muy dispares dividas en dos categorías: mejor aperitivo clásico y mejor aperitivo moderno. Vayco bañó sus mejillones en “una equilibrada salsa de tomate estilo marinera reducida durante dos horas a fuego lento en vermú blanco, que le aporta aroma, sabor y complejidad, conjugando notas dulces, amargas y herbales”, según detallan desde la organización del certamen.
La final, que se celebró el miércoles, eligió como mejor aperitivo de España las patatas bravas de la horchatería Cal Carrero. El establecimiento valenciano fue proclamado vencedor por la “excelente ejecución de una de las tapas más clásicas del recetario nacional”, que convenció al jurado por su “excelente equilibrio y perfecta ejecución, con un exterior crocante en contraste con la melosidad interior”. Las bravas de Cal Carrero incorporan “alioli casero, una salsa para el recuerdo y un toque de Pimentón de La Vera”.
El jurado, integrado por un panel de primer nivel —los chefs con estrella Michelin Ricardo Sanz (Kabuki), José Antonio Campoviejo (El Corral del Indianu) y Diego Fernández (Regueiro), el cocinero Alejandro Villa y los críticos gastronómicos Jorge Guitián y Carmen Ordiz— evaluó minuciosamente las propuestas finalistas atendiendo a criterios de originalidad, presentación, equilibrio de sabores y viabilidad en servicio, aspectos clave en un formato tan breve como exigente. “Las bravas ganadoras representan la esencia misma del aperitivo español”, destacó el cocinero con un astro en Arriondas.
La medalla de plata recayó en Alalunga, por una “excepcional” croqueta de paletilla con hígado de pato caramelizado y tartar de ternera asturiana con emulsión de aguacate, una propuesta que “conjuga innovación, concepto y sabor”. Se trata de “un sutil juego entre el frío y el caliente con frescura, textura y mucha chispa”, según el jurado.
Por otra parte, el bronce fue para Onde Keiras (A Coruña) que conquistó al jurado con un bocado en apariencia sencillo, pero “sorprendente”: un bombón de foie casero con almendra y un “explosivo” corazón de vermú Pico Fino.

La iniciativa reivindica el valor del aperitivo en la gastronomía española y ha contado con la participación de más de 100. Todos ellos pusieron en valor “un momento gastronómico cada vez más celebrado”, el aperitivo, tradición profundamente arraigada en España que “vive una clara evolución hacia formatos más creativos, técnicos y personales”.
Las propuestas participantes se dividieron en dos categorías: Mejor Aperitivo Clásico y Mejor Aperitivo Moderno, con ocho finalistas en cada modalidad. En la categoría clásica se proclamaron ganador el propio Cal Carrero, mientras que en la categoría contemporánea el oro fue para el asturiano Alalunga.
La elección del ganador del certamen ha conjugado dos filtros. Por un lado, el popular, a través del voto del público, emitido tras la degustación en los propios establecimientos, y por otro el profesional, con la evaluación técnica del jurado profesional, haciendo del certamen “un proceso participativo y democrático, fiel al espíritu del aperitivo y del tardeo”.




















