El Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (Causa) envía a la ciudadanía un mensaje de “seguridad, calidad asistencial, humanización e innovación” de los tratamientos que dispensan a los enfermos de cáncer. Así lo ha hecho público este miércoles en una comparecencia de prensa durante la que el equipo del centro ha desmentido las críticas vertidas por la Asociación Bejarana contra el Cáncer, que esta semana difundió en redes sociales un vídeo cuestionando la calidad del hospital de día oncohematológico.
“Desde el servicio de oncología del hospital universitario de Salamanca se garantizan convenientemente los tratamientos indicados y adecuados a cada paciente. Nunca se suspenden tratamientos por no contar con pruebas de imagen -TAC, resonancia, etc-, de seguimiento actualizadas. Y, rotundamente, no es un factor que tenga impacto en supervivencias ni en muertes”, confirma la gerente del Causa, Carmen Rodríguez Pajares.
La infraestructura de diagnóstico por imagen del Causa “está al nivel de un hospital de complejidad del grupo 4 de nuestra comunidad”, recuerda la gerente, quien añade que su renombre es también internacional, pues sus estándares de calidad lo acreditan como centro de excelencia del cáncer en Europa.
Asimismo, en el complejo salmantino “se trabaja en constante comunicación” con los servicios que forman parte del tratamiento de los pacientes con cáncer y, “si hay necesidad de contar con alguna prueba antes de la consulta, nuestro oncólogos hablan con los radiólogos para coordinar de manera personalizada estos tratamientos”, que “se adecuan a las necesidades asistenciales y se coordinan en función de las consultas”, añade Rodríguez.
Por todo ello, desde el hospital se insiste en transmitir “un mensaje de tranquilidad a todos los pacientes y sus familias”, ya que “la atención al cáncer se hace conforme a la sociedad cienfítica que lo representa y a las guías de práctica clínica”, agrega.
En cuanto a la relación del complejo con las asociaciones que apoyan a personas con cáncer, la directiva asegura que la colaboración y el diálogo están siempre en marcha, igual que con entidades sociales vinculadas a otras patologías. “No queremos que esas manifestaciones individuales de una asociación pongan en peligro nuestra identidad y, sobre todo, la confianza de nuestros pacientes como centro de referencia de cáncer”, declara Rodríguez, en alusión a las críticas de la agrupación de Béjar.
En el acto ha intervenido también el jefe del servicio de oncología médica, Emilio Fonseca quien, en la misma línea, que Rodríguez, ha defendido que la atención los enfermes de cáncer que ofrece el centro “está siendo adecuada y de calidad de forma habitual”.
17.000 tratamientos
Los objetivos del Causa son “los mismos” que los de las asociaciones: “la mejor atención posible de todos los pacientes con cáncer y la excelencia”. De igual modo, destaca que se trata de procesos“complejos” que “exigen una importante coordinación para su correcta administración, dado elevado número de tratamietos que se administran diariamente en el hospital de día oncohematológico, 17.000, y por su creciente aumento”, debido a un crecimiento de los casos y “a un mejor control de la enfermedad, que se traduce en una mayor prevalencia de pacientes en tratamiento”, ha explicado Fonseca.
Circuito preferente
Sobre los procedimientos diagnósticos radiológicos, de vital importancia para garantizar una buena calidad del servicio, el hospital de Salamanca dispone de “un circuito específico preferente para los pacientes oncológicos, a fin de disminutir la demora que pudiera existir de no ser así”, lo que genera “un flujo constante de comunicación con el servicio de radiodiagnóstico para minimizar todo lo posible el retraso que pueda presentarse de forma puntual”, garantiza el responsable del servicio de oncología médica.
Hace referencia, además, a mejoras en el hospital de día oncohematológico relativas la capacidad de las instalaciones y la planificación de la agenda. A este respecto, el objetivo es “seguir mejorando”, sin perder de vista “la complejidad de los tratamientos y la dispersión de nuestra población”, apostilla el oncólogo.
