Rotary Club de Salamanca y Natividad Cabezas nos acercan a los emprendedores salmantinos que con imaginación, esfuerzo y entrega están consiguiendo salir adelante en momentos muy difíciles
Cristina Alonso y María Higuera, tras años de trabajo y experiencias en diferentes países del planeta, decidieron regresar al hogar para aplicar en un proyecto toda su experiencia y conocimiento.
Amigas desde la adolescencia estudiaron carreras diferentes: Traducción e Interpretación y Empresariales. Ahora han vuelto a encontrarse para crear su empresa.
Han invertido parte de sus ahorros en un centro de idiomas Lexgo International, con características muy particulares.
Ellas ofrecen algo muy diferente a la academia tradicional de idiomas.
Su negocio posibilita a personas de otros países que quieran venir a España a estudiar el idioma, todo lo necesario para que se sientan como en casa. Desde el alojamiento, el itinerario cultural, hasta clases de perfeccionamiento de español.
No se limita a Salamanca si no que abarca toda España. Las ciudades más demandadas por los clientes son las andaluzas, Barcelona y Madrid.
En el centro imparten clases de diferentes idiomas: Español, para estudiantes de Erasmus, Inglés, Francés y Alemán en grupos muy reducidos, asegurando una excelente calidad de enseñanza.
La metodología es muy motivadora y hace que los alumnos se sientan cómodos y obtengan un aprendizaje significativo.
Cuentan con la colaboración de Antonio, un ingeniero que enseña a grupos de niños a diseñar y reproducir en tres dimensiones los propios juguetes. Así mismo, imparte clases de robótica. Estas dos actividades se acompañan con la explicación en inglés, resultando muy atractiva y sencilla.
Los precios son muy competitivos y los resultados muy positivos, lo que ha dado lugar a obtener clientes satisfechos desde el inicio de la actividad
Para Cristina y María volver a España, después de haber vivido en países como India, Australia, Francia Inglaterra o en las Islas Caribeñas, es todo un reto personal que afrontan con ilusión y esperanza.
Poder ofrecer su bagaje tanto personal como profesional a la sociedad, es digno de admirar y como nuevas emprendedoras les deseamos mucho éxito en su negocio.
¡El que quiere, puede!
Por: Natividad Cabezas
1 comentario en «Dos expatriadas regresan para emprender su sueño»
¡Es un alivio saber que hay jóvenes así!