La Guardia Civil de Salamanca, con la ayuda del perro antidroga del Cuerpo, interceptó este domingo otro cargamento de 11,1 kilos de hachís en un control rutinario en la A-66, cerca de la capital del Tormes.
Sobre las 12’30 horas de este domingo, cuando agentes del Sección de Intervención Rápida de la Guardia Civil de Salamanca junto con el perro detector de drogas del Grupo Cinologico de la Comandancia de la Guardia Civil de Salamanca, estaban efectuando un control en la autovía A-66, en las proximidades de Salamanca, le dieron el alto al un turismo marca Ssangyong ocupado por dos personas, de nacionalidad española.
Seguidamente inspeccionaron el vehículo y el perro detector de drogas marcó de forma clara e insistente en la parte trasera, donde se observó la existencia de una chapa soldada. Al levantarla se halló un doble fondo en el que se localizaron diversos paquetes envueltos en plástico que contenían una sustancia de color marrón, al parecer hachís, que una vez pesados dieron un peso de 11’145 kilos.
Por todo ello fueron detenidos los ocupantes del turismo por un supuesto delito de tráfico de drogas. Se trata de U. G. G., varón de 37 años y R. P. S. mujer de 34 años, ambos españoles y vecinos de la provincia de Vizcaya.
