El alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, se ha quedado con las ganas de inaugurar el remozado parque de La Alamedilla.
Las obras, que comenzaron en diciembre, concluirán a finales de abril, y la ley electoral impide realizar inauguraciones y actos propagandísticos 54 días antes de los comicios, con lo que este lunes era el último día para cortar cintas.
Mañueco se ha tenido que conformar con la visita a las obras, que permitirán recuperar uno de los espacios más queridos por los salmantinos.
Unos trabajos que conservarán algunos elementos tradicionales en la zona de juegos infantiles (el arco de entrada, el tren y algunos animales de piedra,…) e incorporarán mejoras, como la pérgola del centro del estanque de los patos que sustituye al viejo invernadero sin uso, y la zona biosaludable que reemplazará al minizoológico.
Nueva fuente
Además, habrá una nueva fuente de chorros y luces a la que se puede acceder caminando y sentarse en su perímetro, y una zona para bebés y una pérgola para la terraza del bar.
El parque tendrá más iluminación y será más fácil acceder a él sin rodeos.
La reforma, que ha costado 879.190 euros (con un ahorro del 27% respecto al presupuesto de licitación) parece que le sentará muy bien. Ferrovial-Agromán ha sido la encargada de su ejecución.
