El salón de actos de las Siervas de San José fue el escenario donde se han representado las obras de compañía de teatro escolar y de aficionados
El teatro posee la magia de inquietar el pensamiento y sensibilizar a la persona, lo cual lo convierte en una excelente herramienta educativa y preventiva. «El teatro beneficia a los niños en que le aporta compromiso, responsabilidad, trabajo en equipo y además, les da vocabulario y conocimientos de literatura», explica Begoña Gutiez, de la compañía Bojiganga de la Vega, del IES Condes de Saldaña, de Saldaña en Palencia. Su instituto ha concursado en este VII Certamen Nacional de Teatro Escolar y de Aficionados que se ha estado celebra en las Siervas de San José hasta mañana, día 15, con dos obras de teatro.
Además, el teatro tiene la capacidad de captar la atención del espectador, reflejar una realidad, comprender e identificarse con una problemática, sensibilizarse frente a ella y generar un estado de predisposición positiva a la consolidación de aprendizajes futuros. «El teatro aporta compañerismo a los niños. Uno puede ser menos listo en la parte académica y ser un genio sobre el escenario. Nosotros tenemos en la compañía a Ana, una niña con síndrome de Down, y participa en las dos obras que hemos traído aquí», matiza Begoña Gutiez.
Este es el séptimo año consecutivo que se desarrolla esta actividad en las Siervas de San José y con ello pretenden un doble objetivo. Por un lado, potenciar este modo de trabajo con los alumnos, entendiendo el teatro como un vehículo de propagación de la cultura y otra forma de educar. La colaboración de los alumnos como jurado ha supuesto una apuesta para fomentar el espíritu crítico y la capacidad de valoración. Y además, crear una plataforma para exponer trabajos de calidad que muchas veces de manera silenciosa realizamos en los centros. En él han participado ya diferentes colegios de la Comunidad Autónoma que con su buen hacer han contribuido a crear un nuevo espacio educativo. La experiencia ha sido muy gratificante para todos.
