Lucía Risueño es licenciada en Psicología Social y del Trabajo: mejorar la vida de las personas en su vida laboral – PRL y está preparando su tesis doctoral sobre “La Ergonomía Laboral Preventiva: más allá de la Ley de Prevención”, es técnico superior en Prevención de Riesgos Laborales y asesor de trabajadores y empresas
[dropcap]T[/dropcap]odos los días millones de personas se desplazan por las carreteras españolas para ir o volver de su trabajo, o durante el desarrollo del mismo, produciéndose 143 accidentes de media relacionados con la actividad laboral.
También en este caso, la Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales indica que las empresas deben velar por la seguridad de los trabajadores, ya que deben garantizar su seguridad y salud en todos los aspectos relacionados con el trabajo, incluyendo la seguridad vial, ya que es necesario el desplazamiento para poder ejecutarlo.
Los accidentes de tráfico (como los de cualquier otro tipo) tienen unas causas y, por lo tanto, pueden evitarse. Entre estas, se encuentran las condiciones de la vía y climáticas, estado del vehículo, velocidad, consumo de alcohol y drogas, error humano y distracciones, sueño y fatiga, monotonía y repetitividad. La empresa puede introducir hábitos y actitudes preventivas que mejoren la seguridad vial de sus trabajadores.
Entre los costes que producen los accidentes de tráfico para las empresas están los días de baja del trabajador, la pérdida de negocio ocasionado por la pérdida de capacidad productiva, primas de seguros, reparación o reposición de vehículos, desmotivación de los trabajadores implicados y el daño a imagen social de la empresa. A la administración pública, los gastos ocasionados se reparten entre los vehículos de emergencia (ambulancias, bomberos y agentes de tráfico), hospitalización y recursos sanitarios para el accidentado, daños a la vía pública o la eliminación o tratamiento de derrames de sustancias peligrosas (en algunos casos). Socialmente, se pierden los años potenciales de vida de los trabajadores fallecidos (respecto a la esperanza de vida media) y años ajustados a la discapacidad consecuente, que implicará pérdida de calidad de vida.
En consecuencia, el hecho de que las empresas promuevan acciones para prevenir este tipo de accidentes, procurará una mayor seguridad de sus empleados, aumentando la eficiencia de la empresa, además de contribuir a la mejora de la seguridad vial de la sociedad y un incremento de la responsabilidad social corporativa.El coste de prevenir los accidentes de tráfico laborales suele ser menor que el coste económico de los daños personales y materiales que producen. A través de programas y actuaciones de prevención, pueden evitarse.
Con el fin de ayudar a la resolución de esta problemática, el Ministerio del Interior y el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, a través de la Dirección General de Tráfico (DGT) y el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT) han elaborado un portal, entre cuyas herramientas se encuentra el “Plan tipo de seguridad vial en la empresa”. Este plan, tiene por objetivo proporcionar información a empresas y a trabajadores sobre los aspectos relevantes de la gestión de la seguridad vial en el ámbito empresarial, para reducir los riesgos relacionados con los desplazamientos “in itinere” (casa/trabajo/casa) y para mejorar la seguridad vial de los desplazamientos dentro de la jornada laboral (en el centro de trabajo o “en misión”). Esta guía va dirigida a los responsables de la prevención de riesgos de las empresas.
Más información en: Asesoría en Prevención de Riesgos Laborales
