Fuente Ovejuna y la localidad ribereña salmantina están muy próximas en lo que a leyenda y tradición se refiere. Incluso ambas historias son cercanas en el tiempo, la que cuenta Lope de Vega aconteció en 1476 y la que vivió el municipio salmantino se produjo en 1441
[dropcap]H[/dropcap]inojosa del Duero se convierte en un pueblo medieval gracias a una historia y a un pueblo que se levanta contra la opresión, los atropellos, las crueldades y el derecho de pernada del señor de feudal.
Corría el año 1441 cuando una pareja decidió contraer matrimonio. Felices, dichosos y con un futuro por delante celebran los esponsales. Pero, al llegar la noche de bodas, el señor feudal se quiere ‘cobrar’ su parte y se lleva a la novia. El pueblo entero clama venganza y asalta la morada del señor de las tierras de Hinojosa.
Vence el pueblo y huye el cobarde a medio vestir.
Similitudes… muchas con Fuente Ovejuna, la obra clásica de Lope de Vega. Aquel hecho que inmortalizó el Fénix de la literatura aconteció en 1476, aunque él lo escribió en 1613 y se representó en 1619.
Ambas representaciones, la de Fuente Ovejuna y la de Hinojosa del Duero recrean el poder absoluto de los señores feudales o de los comendadores y el triunfo de un pueblo que se subleva ante tanta injusticia.
Esta noche, Hinojosa del Duero vuelve a vencer y el bien se instala entre sus calles empinadas y empedradas.

















































