La Asociación “Ciudadanos por la Defensa del Patrimonio” considera, como ya lo hiciera ante la primera edición, que la Feria de Día «no tiene cabida en una ciudad histórica como Salamanca y que atenta gravemente contra los valores universales por los que se conoce y reconoce a nuestra ciudad».
Durante tres semanas un buen número de plazas, parques y bellos rincones de Salamanca son ocupados por las conocidas casetas junto a sus barriles, contenedores, mesas y sombrillas. «Todo ello sin ninguna regulación estética y causando un indiscutible impacto visual sobre el paisaje urbano, para decepción de quienes nos visitan», indica.
La afección directa a los edificios históricos se mantiene como en la primera edición, «ya que se siguen instalando cables, apoyando objetos (cajas, barriles, etc) y los servicios municipales de limpieza practican todas las madrugadas un vadeo masivo sobre los sillares a fin de retirar el alcohol, la grasa y el orín«.
Molestias
La ocupación del espacio público se incrementa durante estos días sin perjuicio de la circulación rodada «y a pesar de lo menguadas que han quedado nuestras calles tras su peatonalización. A ello deben sumarse las innegables molestias (ruido, suciedad y masificación) que padecen los vecinos de las diferentes zonas», prosigue.
Un ejemplo de ello es el parque de la Alamedilla, uno de los más queridos y disfrutados por los salmantinos, que estos días se convierte en la principal zona: «a pesar de sus reducidas dimensiones, a pesar de ser lugar de paso y a pesar de la retirada de decenas de bancos tras la última reforma. Si bien, no es el único espacio verde que padece los estragos y consecuencias de una feria de difícil encaje en el casco urbano, algo que también ocurre en la Plaza de Colón», explica la asociación.
Considera que «es triste que este evento se haya convertido en la principal actividad de las fiestas patronales, incluso que se erija como la principal cita gastronómica de Salamanca. Para ello se ha valido no sólo de la aprobación, también del apoyo del Consistorio que no es consciente de que más pronto que tarde tendrá que decidir entre un 5% de los días del año entre la cochambre o 365 días en la élite mundial».
Ni ejemplar ni sostenible
Además, asegura que la Feria de Día «es una contradicción con las políticas de salud pública -aunque el Ayuntamiento de Salamanca haya dejado de realizar campañas en favor de un consumo responsable de alcohol- y con las leyes y Ordenanzas Municipales que velan por la sensatez, la educación y la protección de las personas».
La instalación de casetas en las inmediaciones de colegios de educación primaria o la utilización de vasos, platos y cubiertos de un sólo uso, «son otros aspectos que ponen de manifiesto la situación de excepcionalidad que se toma para un evento consumista que no resulta ni ejemplar ni sostenible«.
3 comentarios en «Reclaman que las casetas respeten a la ciudad»
De lo más ridículo e intransigente que he escuchado en mucho tiempo. Lo primero; en todas las ciudades en fiestas se otorga un «estado de excepción». Lo segundo; si no fuese por las casetas las ferias y fiestas se ceñirían únicamente a unos conciertos (bastante rancios por cierto) y unos fuegos artificiales. Y tercero y último; de que vive esta ciudad, de su industria? No, vive del turismo hostelero.
Hay que transigir un poco más señores, que la edad media hace tiempo que paso (afortunadamente)
Lo importante es que la gente demuestre lo civica que es. Esto ayudaria mucho. Estoy de acuerdo en que en estas fechas, mucha flexibilidad
A mí particularmente no me gustan las casetas, ya que me agobia el bullicio,el ruido y me parece antihigiénicas,pero hay que respetarlo,ya que a la mayoría de la gente le gusta,así que con no ir esta todo hecho