Ocurrió en Singapur y varios transeúntes lo grabaron.
Una pitón atrapa durante más de media hora a una cobra real bastante más grande.
Ambas mantienen un tira y afloja, que se salda con la picadura de la cobra real a su adversaria antes de escapar a toda velocidad.
Ambas serpientes fueron capturadas posteriormente. La cobra real fue llevada a un zoo, por tratarse de una especie poco frecuente en Singapur, mientras que la pitón fue devuelta a la selva, donde tiene pocas posibilidades de sobrevivir tras recibir la picadura.