El gremio hotelero de Salamanca no puede evitar sentirse, en parte, decepcionado. Pese a que la ocupación hotelera durante estas vacaciones de Semana Santa ha sido elevada, se esperaban más turistas. El mal tiempo ha influido en los resultados, ya que las precipitaciones y bajas temperaturas que han caracterizado los principales días festivos han sido el freno de un gran número de turistas que pensaban pasar unos días en la ciudad del Tormes.
Desde el Hotel IBB Recoletos Coco afirman que el establecimiento ha estado “bastante lleno”, pero “no del todo”. “Se esperaba más”, concluyen. La cifra, sin embargo, ha sido similar a la de años anteriores. Comparando los días de diario con el fin de semana, este ha aumentado ligeramente la ocupación debido a los días de fiesta nacional.
Por otro lado, el Hotel Tryp Montalvo ha presentado unas cifras distintas. Durante los festivos del Jueves Santo y Viernes Santo consiguieron un 100% de ocupación, mientras que el fin de semana descendió al 80 o 90%. Según afirman, “se debería llenar porque es un hotel pequeño”, pero no fue así. Sin embargo, están conformes con la cifra de este Domingo de Resurrección, ya que consideran que la cantidad de huéspedes es numerosa “para ser un domingo”.
El tipo de turistas que ha recibido Salamanca durante esta festividad ha sido generalmente nacional, aunque han venido bastantes portugueses. Aunque este tipo de turismo es predominantemente familiar, no faltan las parejas que disfrutan de una escapada. Algo en lo que sí están de acuerdo ambos hoteles es que este año se han gastado más dinero debido al clima. Desde el Tryp Montalvo han notado que se ha incrementado el gasto en restaurante al no poder realizar otras actividades.
Este hecho, sin embargo, ha supuesto un punto negativo para la hostelería. Según las previsiones, se esperaba que vinieran más visitantes, pero el mal tiempo ha supuesto un notable obstáculo. Los hoteles admiten que se han producido varias cancelaciones por esta razón y que otros posibles visitantes que aún no habían reservado han preferido no mojarse.
