Cayetano Martínez de Irujo desvela en la segunda parte de la entrevista las obras que van a acometer en el Palacio de Monterrey y que no acudirá este año al concurso de saltos
Es usted un reconocido deportista y representa a los deportistas como presidente de la Asociación de Deportistas. La asociación impulsó el programa «Sport and Trops», en el que participó Salamanca. ¿Qué tal ha funcionado?
Cayetano Martínez de Irujo: Sí, desde la Asociación de Deportistas hemos puesto en marcha el proyecto Sport & Trops, en Salamanca se ha hecho en seis colegios, ex deportistas de elite imparten valores, alimenta saludable, conferencias y los fines de semana había competiciones. Ha funcionado muy bien. Tenemos muchas peticiones para llevarlo a otras ciudades, pero queremos mantener las que nos han sido fieles desde el inicio, como han sido Salamanca, Valencia, Madrid, Badalona, La Laguna y Guadalajara. Repetimos el año que viene y luego crecemos cuando tengamos más patrocinadores. -El Colegio Santa Catalina de Salamanca ganó el trofeo «Sport and Trops» que disputó en Madrid-.
[pull_quote_left]Este año no puedo venir al torneo de las Ferias, porque he vendido el caballo y se me ha lesionado la yegua. Es una pena porque este concurso me encanta[/pull_quote_left]
¿Qué parte ocupa el deporte en su vida?
C. M. I. Ahora como diversión. Este año no puedo venir al torneo de las Ferias, porque he vendido el caballo y se me ha lesionado la yegua. Es una pena porque este concurso me encanta. Pero estoy solo con un caballo y medio, por lo que no puedo venir. El deporte para mí ha sido mi profesión y formación, porque la formación de un deportista de élite es incomparable. Te da una herramientas que te permiten ser capaz de hacer todo lo que te pongan entre manos. Y luego como deportista estoy muy contento, he hecho una carrera deportiva más que digna.
¿Qué le ha enseñado?
C. M. I.Todo. Me ha dado una formación de vida que no me la hubieran dado tres carreras académicas. Me fue fuera de España con 23 años y estuve fuera 11 años, cuatro en Holanda, seis en Francia y uno en Bélgica. Me he hecho el camino por la vida real de una forma igual de dura que cualquiera, pero yo salí de un Palacio que cuesta más, porque tienes que romper unas estructuras.
Es usted atlético. ¿Qué le ha enseñado la filosofía atlética para la vida?
C. M. I. Me pasé del Madrid al Atlético hace ocho años.
¿Es usted un converso?
C. M. I. (Risas) Sí.
[pull_quote_left]Soy un luchador nato y el Atlético lucha hasta el final, nunca baja los brazos, nunca cede y siempre está entregado y luego hay una causa más, la de que ganar era un accidente, porque lo que tenemos desde hace unos años ha sido una cosa espectacular[/pull_quote_left]
¿Por qué se hizo colchonero?
C. M. I. Porque cuando empecé a ir a ver al Atlético de Madrid comprobé que me sentía más identificado con este equipo que con el Real Madrid, por eso y por la afición. Además, soy un luchador nato y el Atlético lucha hasta el final, nunca baja los brazos, nunca cede y siempre está entregado y luego hay una causa más, la de que ganar era un accidente, porque lo que tenemos desde hace unos años ha sido una cosa espectacular. Me pasaba lo mismo, no sé por qué, pero me costaba más que a ninguno ganar. Todo me ha costado muchísimo. Igual o más que al que más. Por lo que mencionaba antes, he nacido en un palacio, nadie me ha ayudado hasta que no lo he demostrado, que en mi caso fue en Barcelona-92, cuando quedé cuarto y mi madre dijo: ‘Pero, ¿cómo ha llegado este tío aquí?’. Por otro lado, cuando naces en un palacio te crean unas estructuras contrarias a lo que es pelear en la elite del deporte o en la vida. Tienes que romper las barreras educacionales, porque llevas unas etiquetas y todo el mundo cree que no necesitas nada, por lo que te lo ponen más difícil. Yo he sido un tío que ha peleado como gato panzarriba, como un león, todo me ha costado mucho.
¿Va al Calderón con su hijo? (Tiene dos hijos Luis y Amina)
C. M. I. Sí, si. Yo he ido madurando en la vida, me he ido conociendo a mí mismo y me he dado cuenta que me sentía más cerca de los valores del Atlético de Madrid que del Real Madrid. En la vida puedes variar y cambiar, no debes encajonarte. Yo lo que le aconsejo a mi hijo es que comience siendo madridista y luego que se cambie si quiere, pero me ha salido Atlético fanático, intento que no sea antimadridista. Si le digo: ‘No te acostumbres, macho’. Me refiero a lo de ganar. Es un caso insólito lo que tenemos en estos años, lo bien que ha trabajado la directiva y Simeone, sobre todo teniendo en cuanta el presupuesto del Atlético. Lo suyo es estar entre los diez o doce equipos mejores de Europa y que se consolide ahí, eso sería magnífico. A mí me costaba más de lo normal ganar y eso también le pasaba al Atlético y la afición tan deportiva, tan especial… Se pierde y salen contentos del estadio. Es una afición incondicional y ejemplar.
¿Cómo pasará el verano? Teniendo en cuenta que los agricultores trabajan mucho en verano.
C. M. I. Trabajado, de una empresa a otra, y en medio estando un poco con mis hijos en el sur. Ahora estoy aquí, en Salamanca, mañana en Córdoba o Sevilla, luego vuelvo, y así estamos.
¿Cómo está Cayetano?
C. M. I. Bien. Estoy contento.
¿Está enamorado?
C. M. I. Ahí estamos. (sonríe).
Volviendo a Salamanca. Hemos visto que tienen mallas en la fachada del Palacio de Monterrey. ¿Qué están haciendo?
C. M. I. Se cayó una piedra y nos costó 18.000 euros arreglar el desprendimiento. Estamos viendo la forma de arreglar toda la cubierta para que no se caiga, porque ya se hizo un enorme arreglo aquí, pero ahora tenemos que hacer otro. Esto es un pozo sin fondo. Estamos gestionando para que lo hagamos lo antes posible.
¿Es una joyita?
C. M. I. Sí, pero no nos ha dado un duro nadie. Esto nos ha chupado la sangra. Los tres palacios nos han chupado la sangre.
¿Cuándo piensan que comenzarán a acometer las obras?
C. M. I. Creo que en septiembre terminaremos la gestión para ver como alcanzamos la financiación y veremos como podemos acometer la obra.
