[dropcap]L[/dropcap]a Casa del Artista mantuvo una estrecha colaboración con la Casa Municipal de Cultura, especialmente con la Sala de Exposiciones de la Rúa, y para la selección de los artistas que debían decorar nuestras calles y plazas. Fue decisión suya que Amable Diego esculpiera la escultura de Santa Teresa.
Jesús Málaga
La biblioteca, el auditorio de música y las casas de cultura de los barrios
[dropcap]L[/dropcap]a Biblioteca abrió sus puertas el 8 de septiembre de 1981 ofreciendo 30 puestos de lectura. En 1982 se puso en marcha la Hemeroteca y Fonoteca con ocho espacios para la audición. En verano se instalaron puntos de lectura en La Alamedilla, el Taller de Pizarrales y dos más en La Vega y Tejares.
La Casa Municipal de Cultura
[dropcap]E[/dropcap]n 1981 se instaló en la antigua Casa de Socorro la Casa Municipal de Cultura, en la Plaza de Gabriel y Galán. Se puso en marcha el Plan de Acción Cultural, PAC, que coordinaba las muchas actividades culturales de la ciudad. El plan abarcaba literatura, cine, teatro, música, artes plásticas, artesanía y fotografía, así como espectáculos de calle realizados en espacios abiertos. Se suprimió la política de subvenciones a las diferentes iniciativas a cambio de colaboraciones.
El éxito de la Escuela Municipal de Cine
[dropcap]E[/dropcap]n la edición del Festival de Gijón 1982 volvieron a premiar a la Escuela de Salamanca. Otra vez lograron hacerse con el premio “Juvenalia”, dotado con 100.000 pesetas. Recayó en nuestros muchachos por su creatividad.
La Escuela Municipal de Cine
[dropcap]L[/dropcap]a Escuela Municipal de Cine nació en 1979. Cuando llevaba dos años de andadura colaboró con la “Linterna Mágica” de Turín, Italia. Se abrió al lenguaje de la televisión; la escuela suplió la falta de programación de cine para niños programado sesiones cinematográficas infantiles.
Salamanca apuesta por la cultura
[dropcap]T[/dropcap]uve claro desde el primer momento que debíamos apostar por un modelo de ciudad en el que la cultura fuera la tarjeta de identidad de Salamanca.
El arco del Perdón
[dropcap]T[/dropcap]ermino con una referencia al Arco del Perdón. La cofradía de la Seráfica Hermandad del Santísimo Cristo de la Agonía ha tenido para mí desde niño una significación especial. El Domingo de Ramos por la tarde, después de desfilar por la mañana con el colegio en la procesión de la Borriquilla, la familia nos dirigíamos a ver la salida de la procesión del Perdón de la iglesia del convento de las Bernardas, en lo que hoy es colegio de los Escolapios.
La Virgen de la Salud, las esculturas de San Bernardo
[dropcap]T[/dropcap]ejares tampoco tenía escultura, y consideramos con los vecinos que se la debíamos dedicar a la Virgen de la Salud. En este pueblo-barrio existió un templo dedicado a una diosa romana. Con la cristianización se trasformó en devoción a la Virgen, en su advocación de la Salud.
Esculturas en los barrios
[dropcap]P[/dropcap]ara terminar este apartado dedicado a las esculturas que poblaron Salamanca durante mis tres mandatos como alcalde, me gustaría recordar aquellas que se colocaron en los barrios y que tenían por misión dignificar las zonas periféricas, evitando concentrar el arte escultórico en el centro de la ciudad.
El Lunes de Aguas, el origen de la leyenda
[dropcap type=»1″]E[/dropcap]l Domingo de Cuasimodo, domingo posterior al de Pascua, el plenario de la mancebía, acompañado por el Padre Putas, pasaba el río para dirigirse a la Catedral Vieja donde las pupilas oían misa, confesaban y comulgaban para cumplir con el precepto de la Iglesia que impone recibir dichos sacramentos como mínimo una vez al año, por Pascua Florida. El lunes siguiente se preparaba la gran fiesta que ha llegado hasta nuestros días y que recibe el nombre de “Lunes de Aguas”.
