[dropcap]H[/dropcap]eredó el negocio de mis padres, el Mesón Don Pepe, pero lo ha hecho suyo, incluso en el nombre: Doña Pepa. «No entendí porque le pusieron ese nombre, porque mi padre se llama Manuel . Es una forma de seguir la tradición. Me ha dicho mi padre que me olvide de que me llamen Leticia, ahora seré Pepa», explica entre risas Leticia Martín Sánchez, responsable del mesón Doña Pepa, ubicado en la plaza del Corrillo.