[dropcap]L[/dropcap]a historia del planeta donde vives comprende aproximadamente los últimos 4570 millones de años. Supernovas, nubes de gas que se comprimen, choques cósmicos, cambios climáticos, erupciones volcánicas, extinciones masivas, movimientos tectónicos, evolución y revolución de especies… De todo ha pasado por aquí en este último rato.
De toda esta alquimia surgimos unos seres llamados humanos. Dotados de inteligencia y autoconciencia caminamos erguidos e interactuamos con nuestro entorno, por lo general, obteniendo unos beneficios fuera del alcance del resto de las especies. No conozco casos de puentes construidos por ñus para evitar al peligroso cocodrilo por ejemplo. Hacemos incluso muchas cosas por puro hedonismo (esas vacaciones la primera quincena de agosto en Benidorm). Por puro placer, si eso no es tener poder… Ser desarrollado como ningún otro el humano.
Casi todo lo hacemos bien aunque también es cierto que no terminamos de sacar el mejor partido a alguno de los aspectos con los que hemos sido afortunadamente dotados. Te propongo solamente uno de ellos en tres preguntas.
Razona una respuesta: ¿Cuántas orejas tienes? ¿Cuantas bocas? ¿Qué utilizas más?
Piensa que si después de esos 4570 millones de años tienes el doble de una cosa que de la otra, no puede obedecer más que a una CAUSAlidad. Si hubiera sido necesario tener dos bocas y sólo una oreja ya nos habríamos extinguido seguro.
Cuando me escuchas, en lugar de oírme o aprovechar mientras hablo para elaborar esa respuesta definitiva y letal con la que tumbar mi argumento consigues un montón de cosas mágicas.
Me veré invitado a compartir una atmósfera positiva en la que ambos nos entenderemos mucho mejor. Podrás llegar a lo que quiero decirte en lugar de quedarte con cualquiera de tus interpretaciones, que lamento comunicar, puede estar a un gúgol de kilómetros de lo que yo quiero transmitir. Au revoir, malos entendidos, creíques y penséques… Ah, y por haber estado escuchando, podrás preguntar para matizar o ajustar o definir.
En cambio, cuando yo no te escucho, sino que te oigo o preparo mi respuesta… Entenderás que no te acepto. Incluso seré capaz de aconsejarte que es lo que debes hacer (mintiéndote por supuesto, te estaré diciendo lo que yo haría o debería de hacer, tú me darás igual). La sensación que tendrás será cualquiera excepto la de comodidad por lo que dejarás de regalarme de buen grado tus experiencias y yo jamás podré aprovecharme de ellas.
Bocazas es un término peyorativo con el que etiquetamos a quien habla de más. ¿Cómo llamarías a quien escucha de más? ¿Orejazas?
¿Se puede llegar a escuchar de más?
Más información en: moveyourself-coaching.com
1 comentario en «Parole parole parole»
Se puede, mas y mejor