Salamanca, capital mundial de los Derechos Humanos en 2016

La estatua de Fray Francisco de Vitoria y detrás, la Iglesia de San Esteban y el convento de los Dominicos.

El I Grupo de Apoyo Cívico sin Fisuras al VIII Centenario de la Universidad de Salamanca propone destacar a Salamanca como “ciudad humanística” y defensora de los Derechos Humanos.

 

El próximo año se celebra el VIII Centenario de la aprobación de la Orden de Predicadores -fundada en Toulouse (Francia) en 1215 por el canónigo español santo Domingo de Guzmán y que en 1216 recibió la aprobación del Papa Honorio III. «Nuestro Convento de San Esteban es el epicentro de esta Orden dedicada al Estudio y Docencia de la Teología y fue embrión de grandes ideas para la Humanidad (Derecho de Gentes- Ética y Valor del dinero,…) y personalidades en los siglos venideros, conformando lo que se ha dado en llamar la Escuela de Salamanca de los siglos XV y XVI«, explican desde el I Grupo de Apoyo Cívico sin Fisuras al VIII Centenario de la Universidad de Salamanca.

La propuesta que han elaborado es unir a los ciudadanos de Salamanca –los que viven aquí y los que nos llevan en su corazón- con las Instituciones de Salamanca: Ayuntamiento, Convento de San Esteban, Universidad de Salamanca, Universidad Pontificia de Salamanca y Obispado en un “solo cuerpo” para preparar con éxito en 2018 el VIII Centenario de la Universidad de Salamanca.

«Hay que tender puentes de cultura con Cataluña haciendo un homenaje a Ernest Lluch, político catalán asesinado por ETA y gran defensor de la Escuela de Salamanca que en verano celebraba aquí seminarios con sus publicaciones», puntualizan.

Otra de sus iniciativas es la de hermanar Toulouse con Salamanca para el intercambio de escolares y encuentros culturales, haciendo de Salamanca la única Capital de la Cultura de Europa que desea crear una “tela de araña” entre capitales de distintos países de la Unión.

El I Grupo de Apoyo Cívico sin Fisuras al VIII Centenario de la Universidad de Salamanca señala que la ciudad cuenta con medios, por ello, ha presentado al Ayuntamiento este proyecto, para que esta propuesta sea votada en un Pleno Municipal del Ayuntamiento de Salamanca invitando al prior de los Dominicos, al obispo, a la rectora de la Universidad Pontificia y al rector de la Universidad de Salamanca.

Ellos recomiendan que se centralice toda la actividad en el Convento de San Esteban para ponerlo en valor como epicentro por su gran patrimonio y su gran historia.

Por otro lado, también incluyen que se puede invitar a Salamanca a una Delegación de la Asamblea General de las Naciones Unidas para hablar de los Derechos Humanos en la actualidad y de los derechos de las personas afectadas por los conflictos bélicos, los desastres naturales y las crisis económicas. «La Escuela de Salamanca fue pionera en buscar soluciones que hoy en día siguen siendo válidas», matizan.

En cuanto a la financiación, ellos sugieren “tirar al máximo de nuestro gran fondo de armario. Tenemos todo: Convento de los Dominicos, Historia, Cultura, Palacio de Congresos, conventos semi-vacíos, Hoteles, restaurantes y una ciudad en la que sus piedras hablan del pasado de la Humanidad y muestran camino para un futuro en paz y prosperidad poniendo freno al caballo desbocado de la que ya se ha dado en llamar: Tercera Guerra Mundial».

Concluyen que con mucha voluntad política no se necesita mucho dinero para este importante evento. «La Familia Real y el Gobierno lo apoyarían. Las Fundaciones emblemáticas de Salamanca, también».

1 comentario en «Salamanca, capital mundial de los Derechos Humanos en 2016»

  1. Estimada Crónica de Salamanca:

    Este Primer Grupo Cívico no lo hubiera expuesto mejor.

    Lo tenemos todo para que Salamanca recupere el sitio perdido en el mundo.

    Solo es cuestión de que las autoridades y los ciudadanos nos unamos en un solo proyecto: Incluir y no excluir, es la solución.

    La apropiación indebida del Patrimonio, de las Instituciones, de los «cargos», es la que impide a los demás hacerse partícipes de eventos que deben ser de todos. La «exclusión» es el denominador común que demuestran todos aquellos que siembran el odio y la violencia, por tanto combatir la exclusión debe ser nuestra máxima prioridad.

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