Todos y cuando digo todos es TODOS hemos recibido o mandado alguna frase profunda por nuestras redes sociales. Pues bien, un estudio realizado por la Universidad de Waterloo, en Ontario, Canadá, asegura que las personas que comparten compulsivamente frases ‘profundas’ en las redes sociales presentan un bajo nivel de inteligencia.
Y es que poner en el muro frases de Ernest Hemingway o de Paulo Coelho o de Albert Einstein no nos convierten en ellos, por más que le demos al ‘Me gusta’ o lo compartamos.
El estudio
El profesor Gordon Pennycook y su equipo tomaron como muestra para realizar el estudio a Universidad de Waterloo universitarios a 300 personas. Ellos se ofrecieron a participar en el estudio a cambio de crédito de curso. Sólo participaron estudiantes que se encargaron de analizar frases como: “El significado escondido transforma incomparablemente lo abstractamente hermoso”.
Los investigadores observaron otros factores, incluyendo habilidad cognitiva y “confusión ontológica” (o sea, confundir un tipo de conocimiento con otro) y dedujeron los niveles de inteligencia de los participantes.
Las conclusiones a las que llegaron
El estudio indicó que más de un cuarto de los estudiantes sintieron que las frases que se cuelgan en los muros son ‘inspiradoras’ o ‘muy inspiradoras’. Pero, hay más. Estos universitarios tienen menos inteligencia emocional, verbal y numérica, así como que son menos reflexivos. ¡Acabáramos! Parece un contrasentido, pero analicen ustedes a las personas que les envían compulsivamente este tipo de frases y quizá los investigadores canadienses no vayan desacertados.