La vecina más longeva procedió al encendido navideño de la plaza del Oeste
Erguida, feliz, sonriente y rodeada de sus familiares y amigos, Beatriz Pérez, la vecina más longeva del Barrio del Oeste fue la encargada de iluminar la Navidad en la plaza del Oeste.
Se la veía bien. No soltó en ningún momento el mando que accionaba el encendido. Obediente, porque hasta que no le dijeron que apretara el botón, no lo hizo. Y después, más felicitaciones y más piropos, porque lo cierto es que viendo a Beatriz, nadie diría que ya ha celebrado 101 Navidad, va camino de cumplir 102 años.
Después, fiesta y caldo para calentar a las decenas de vecinos que se acercaron a compartir este momento tan emotivo y divertido.