La dosis de recuerdo prevista por el calendario de vacunaciones sistemáticas de la infancia a los seis años se aplaza temporalmente en Castilla y León por los problemas existentes de suministro de la vacuna dTpa (tétanos, difteria y tosferina).
Según informa la Consejería de Sanidad, se trata de la misma formulación que se administra a las mujeres gestantes para proteger a sus bebés antes de la primo-vacunación, por lo que la Dirección General de Salud Pública ha tomado esta decisión, ya prevista por el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, para garantizar su acceso a la vacunación frente a la tosferina.
La escasez a nivel mundial de vacunas trivalentes con componente tosferina desde hace varios meses por problemas de fabricación que afectan a los dos laboratorios que las elaboran, y que podrían prolongarse más en el tiempo, obliga a la autoridades sanitarias españolas a priorizar el uso de las vacunas disponibles con el objetivo de minimizar esta circunstancia en los programas de vacunaciones sistemáticas.
La vacuna dTpa (triple vírica, de baja carga antigénica), protagonista de esta situación, es la que se usa para la llamada dosis de recuerdo que los niños de seis años reciben frente al tétanos, la difteria y la tosferina.
Es la misma vacuna que se administra a las mujeres gestantes en la semana 28 de embarazo para la inmunización de sus recién nacidos frente a la tosferina, mientras que, por su parte, la primo-inmunización de los bebés ante esta enfermedad se realiza a los dos, cuatro, seis y dieciocho meses, siendo fundamental completar esta pauta para una correcta protección.
Sin riesgo
Ante esta situación, «y por la necesidad de priorizar las dosis disponibles de la dTpa», la Dirección General de Salud Pública, con el asesoramiento de expertos en vacunología y Pediatría, ha decidido suspender, de manera transitoria, la administración de la dosis de recuerdo a los niños de seis años.
Esta decisión, que entrará en vigor el próximo día 1 de enero, será de aplicación a los nacidos en 2010 que, a lo largo del año que viene, alcancen esa edad de seis años prevista por el calendario oficial de vacunaciones sistemáticas de Castilla y León.
Al tratarse de una dosis de recuerdo, es decir, destinada a mantener una protección a largo plazo y «en un grupo poblacional en el que la clínica de la enfermedad raramente presenta complicaciones y, de haberlas, éstas son menos graves, la suspensión provisional de la administración de la vacuna de recuerdo frente a la tosferina no supone un incremento del riesgo individual ni epidémico«.
Prioridades
Por ello, las autoridades sanitarias en el conjunto del Sistema Nacional de Salud han optado por priorizar la vacunación de las embarazadas y así proteger a los recién nacidos porque en los primeros meses de vida el riesgo de complicaciones es sensiblemente superior.
Castilla y León, junto con Aragón y Murcia, han retrasado la vacunación de recuerdo de la triple vírica a los niños nacidos a partir de 2010 a partir del próximo 1 de enero, decisión ya vigente desde hace meses en la mayoría de las comunidades autónomas españolas.
La medida, transitoria, será revocada cuando se reponga el suministro normalizado de la vacuna dTpa; mientras la situación que ha obligado a adoptarla se mantenga, la vacunación de los niños nacidos de 2010 en adelante se irá realizando a medida que se dispongan de las dosis necesarias y, para ello, se realizarán campañas específicas de captación que se comunicarán a los padres y a los profesionales sanitarios oportunamente.