El óxido de la cubierta de la piscina climatizada de Garrido caía al agua hasta ahora que se ha descubierto con la revisión de las instalaciones tras la avería de la caldera, que obligó a cerrar el complejo a primeros de enero.
La pieza para solucionar la avería principal tardó varios días en llegar y no se prevé que se pueda reabrir la piscina al público antes del día 28.
La empresa adjudicataria del servicio, Piscis, descontará del próximo recibo los días que la piscina ha permanecido cerrada.
La oposición municipal ha solicitado al edil de Deportes que se entere de la situación de la plantilla, por la empresa aprovecha el parón para descontarles del sueldo los días que se han perdido, o les obliga a trabajar más jornadas para recuperar esas horas.
Ganemos Salamanca insiste en que toda esta situación «es por el abandono de las piscinas por parte de la anterior empresa concesionaria, Eulen, hecho que seguiremos denunciando hasta que se depuren responsabilidades», y quiere saber si los gastos que se han originado ahora van a repercutir en las arcas municipales o se hará cargo la nueva empresa concesionaria.
