La Guardia Civil ha descubierto el cadáver de una mujer que llevaba más de un año muerta en el sofá de su casa, en la localidad madrileña de Valdilecha.
Ángela G.G., de 52 años, estaba tendida en el Sofía de su vivienda en avanzado estado de descomposición cuando los agentes accedieron al piso de la fallecida.
Unas semanas antes, los vecinos de la localidad (que cuenta con 3.000 habitantes) habían alertado a la Guardia Civil de la ausencia de la finada, que no tenía muchos lazos con sus convencinos ni con sus familiares.
Una vez que los guardias obtuvieron la autorización judicial para entrar en la vivienda, al quitar la mirilla vieron ya el cuerpo sin vida de Ángela tendido en el sofá sin aparentes signos de violencia, por lo que su muerte se atribuye a causas naturales.