El municipio serrano de Linares de Riofrío se convirtió este sábado en el escaparate de los perros de caza. Hasta cincuenta rehalas se dieron cita en la cuarta edición de la feria cinegética para que los aficionados se pusieran al día.
Durante la jornada se realizaron distintas actividades relacionadas con el mundo cinegético, como prueba de trabajo de podenco sobre conejo, exhibiciones de caza en sus distintas modalidades, concentración de rehalas y perros de caza, exhibición de cetrería y, la novedad de la feria, un montaje y curso práctico de pesca.
Todo ello con el objetivo de relacionarse con el medio natural y la conservación del entorno.
La feria contó con la participación de distintas asociaciones ligadas a este mundo: el Club español Deustcher Jagd Terrier (cdejt), la Asociación española de perros especialistas en sangre (Aepes), Asociación española para el fomento y la cría del alano español (sefca), Federación Española de caza, Asociación española de rehalas y el Club deportivo Mosqueros del Tormes.
El alcalde del municipio, Ignacio Polo, reivindicó la ayuda de la Diputación para este certamen, “porque no recibimos subvención, como las de alimentación, cuando la caza tiene gran importancia en nuestra provincia”. La Diputación destina 105.000 euros anuales a las ferias que subvenciona.
