Tenebrón ha despedido sus fiestas patronales con una merienda de fraternidad para sus vecinos.
Hasta el frontón, lugar de la parrillada, acudieron unos 400 tenebroneses que dieron buena cuenta de la carne asada a la brasa. Además, la merienda estuvo amenizada con música de charanga por lo que la fiesta se prolongó hasta la medianoche.
Pero, eso fue el broche final, por la mañana, grandes y pequeños pudieron correr, pasar ‘miedo’ y demostrar su pericia con los carretones. Fue un rato muy divertido viendo como los niños se lo pasaban bomba con los ‘astados’.
El último día de los festejos en honor de San Ceferino no sólo ponen fin a las fiestas patronales, también es jornada de despedidas de amigos que tardarán muchos meses en volver a verse, de recuento de anécdotas y de promesas de volver a disfrutar del pueblo, eso sí, ya será el próximo verano.