El hospital deriva pruebas a la Santísima Trinidad

Josefa P. está encantada, después de un año, le han llamado para hacerse una resonancia, pero a la vez está muy preocupada y se pregunta qué está pasando con la Sanidad Pública. «Me han llamado para decirme que ya tengo hora y día para hacerme la resonancia, pero en la Santísima Trinidad. Esto huele muy mal».

La Plataforma de Salamanca para la Defensa de la Sanidad Pública lleva meses denunciando el desmantelamiento que sufre nuestro hospital, así como el conjunto del Sistema Sanitario a lo largo y ancho no solo de la provincia, también de toda la geografía Española.

Hace más de un año,  los facultativos indicaron a Josefa P. (no es su nombre real) que tenía que hacerse una resonancia, una de las pruebas que debía realizarse. Durante estos meses, ha venido en varias ocasiones al hospital y aprovechando el viaje, ha bajado a citaciones para ver cómo iba lo suyo. «Unas veces me decían que me armara de paciencia, que estas pruebas son lentas, pero la última vez me indicaron que me llamarían de la Santísima Trinidad y eso me extrañó».

Así ha sido. Josefa P. tiene la prueba programada el día 31 de diciembre, es más cuando le dijeron el día, pensó que era una broma, pero es en serio. «A mi marido también lo han llamado dos veces para que se vaya a operarse a Zamora. No sé qué está ocurriendo», se pregunta.

La Plataforma lleva meses señalando que las mayores listas de espera quirúrgicas de la región están en Salamanca, se siguen derivando pacientes para operarse en clínicas privadas (a pesar de que el consejero lo niega), se cierran plantas y todo eso desemboca en una saturación de trabajo para los sanitarios y un empeoramiento de la calidad asistencial que reciben los pacientes.