[dropcap]L[/dropcap]a mayoría de los padres quieren que sus hijos practiquen un deporte. Hay una gran variedad de disciplinas deportivas, algunas individuales como: atletismo, natación, esgrima, judo… y otras colectivas como: fútbol, baloncesto, balonmano… Sin embargo existen deportes que son más atractivos para los menores como es el caso del fútbol o el baloncesto, seguramente tiene mucho que ver en esta elección la gran afición que se da entre los padres y el marketing que los grandes clubes ofrecen.
Practicar un deporte es necesario y muy beneficioso para la salud física y mental de los hijos, sin olvidar el efecto socializador, pero antes de definirse por uno, las familias tienen que conocer algunos detalles para lograr que el deporte se convierta en una actividad positiva y no catastrófica como sucede en algunos casos.
- Es importante que la elección de un deporte esté adecuado a la edad de los escolares. Antes de los ocho años no están preparados para practicar deportes de equipo y mucho menos de competición porque no se adaptan a los reglamentos. Tienen que ser juegos deportivos.
- En ocasiones los niños practican el deporte que le gusta al padre, normalmente fútbol y trasladan a los partidos las emociones que sienten ellos, produciéndose situaciones de violencia verbal y física contra los jugadores , que se ve agravada cuando intervienen los padres y se dan episodios realmente lamentables: Agresiones contra los árbitros si los resultados no son los deseados, palizas entre los espectadores, padres y madres, insultos, lanzamiento de objetos y un sin fin de acciones violentas que terminan en denuncias, en finalización de amistades entre familias que duraban años y lo peor que son los modelos que los más pequeños aprenden y que después trasladan a su vida diaria.
- El objetivo de la práctica deportiva tiene que ser disfrutar y en ningún caso la competitividad llevada a los límites de la violencia.
Desde estas líneas animamos a los padres que sean el mejor ejemplo de convivencia para sus hijos.
Ilustración: Miguel González Cabezas