Miles de salmantinos se congregaron este domingo de ramos en el recorrido de la procesión de La Borriquilla, una de las más emblemáticas de la Semana Santa salmantina.
Eso, y la soleada mañana de primavera, contribuyeron a dar un gran ambiente a la zona centro de la ciudad.
La mayor parte del público se concentró en la plaza de Anaya, para ver salir de la Catedral nueva el paso y a los cofrades (entre ellos, muchos niños).
El paso de La Borriquilla refleja la Entrada de Jesús en Jerusalén y cuenta con un nuevo hermano mayor de paso, en concreto, Raúl Solórzano Rodríguez; y en el paso de La Palabra, Alma Martín Barbero.
Los dos pasos portaron un lazo dorado donde aparece bordado ‘Soy un superhéroe’, en honor a los niños enfermos de cáncer.
La agrupación musical del Cristo Yacente y la Banda de Música Ciudad del Tormes acompañaron la procesión.