Después de unos difíciles años de recortes, sin apenas oferta de empleo público, el Gobierno ha anunciado la oferta de numerosas plazas de empleo para el próximo año. Muchas personas están aprovechando la situación y acercándose a las academias de oposiciones para labrarse un futuro en este sector.
Juan Vicente Pérez, director de la Academia Darwin, considera que “van a ser tres años muy buenos” en cuento a oferta de empleo público, algo “nunca visto” en sus más de treinta años de experiencia al frente de la preparación de oposiciones en Salamanca. De una media de 200 plazas ofertadas en los últimos años, las oposiciones de Policía Nacional ascienden a 3.201, al igual que la Guardia Civil (1.801 plazas), las de soldado (2.000) o las del Ministerio de Justicia (2.063).
La Policía Local también incrementa su oferta de plazas, pasando de una media de 5 a 14 plazas, así como el Cuerpo Municipal de Bomberos (14 plazas). Eso, en Salamanca. En total, se ofertan 250.000 plazas para el año 2018 en el conjunto del país, la mayor oferta de empleo público hasta la fecha.
Este incremento de plazas va unido a un aumento del número de alumnos que se lanzan a estudiar oposiciones. Es lo que Juan Vicente Pérez conoce como “efecto llamada”, ya que el anuncio de la convocatoria de oposiciones atrae a muchas personas que buscan mejorar su situación laboral. Las oposiciones más demandadas son, para los hombres, las relacionadas con los Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y, para las mujeres, las de auxiliar administrativo en todas sus vertientes. Por otro lado, las que menos estudiantes tienen suelen ser las de funcionario de prisiones y las más específicas, relacionadas con determinados estudios.
Pese a que todas las oposiciones requieren esfuerzo y un alto nivel de exigencia, las más fáciles de aprobar son las de Policía Nacional, soldado o Guardia Civil. Al contrario, las consideradas más complicadas son aquellas ofertadas por el Ministerio de Justicia, Policía Local y las de Gestión, tramitación y auxilio.
Pero, ¿qué debe tener en cuenta una persona antes de embarcarse en el estudio de oposiciones? Desde la Academia Darwin dan siempre una serie de claves que empiezan por aconsejar a la persona interesada que elija bien la oposición que quiere hacer y conozca en profundidad sus competencias.
Una oposición es un trabajo para toda la vida y el proceso de preparación es duro, por lo que debe tomarse muy seriamente y con gusto. En segundo lugar, instan a valorar su situación personal, informándose de los requisitos y valorando si puede dedicarle las horas de estudio necesarias. Con un trabajo a jornada completa, por ejemplo, no lo consideran viable a corto plazo.
Hay que tener en cuenta que es una actividad que requiere una profunda constancia y resistencia. Dependiendo de la oposición, puede aprobarse en un curso o en más, pero siempre hay que tener presente que no es un examen en el que haya que aprobar, sino que se está compitiendo de manera directa con una media aproximada de 30 personas para una sola plaza. No basta con sacar buena nota, hay que ser el mejor.
Para ello, aconsejan planificar bien el tiempo de estudio. Se comienza con una dosis moderada de estudio para ayudar al estudiante a acostumbrar cuerpo y mente; después se va aumentando hasta alcanzar unas ocho horas diarias en los últimos meses de preparación. Algunas de las claves son buscar las horas de estudio de mayor rendimiento, hacer resúmenes y esquemas, y no asumir más obligaciones que quiten tiempo de estudio.
Pero, sobre todo, aconsejan una última cosa: “no desanimarse”. Las oposiciones pueden ser muy duras y probablemente no se saquen en un año, pero el estudiante no debe tirar la toalla, sino seguir estudiando, porque todo esfuerzo tiene su recompensa.
Texto: Paula Castro Morán