Alba de Tormes puso este domingo el broche de oro a su variada y completa feria de San Antonio, que celebró el fin de semana pasado la feria agroganadera y este, la agroalimentaria y de artesanía.
Y lo ha hecho bajo un calor tórrido que hacía imposible el desarrollo de una vida normal.
La jornada final comenzó con un taller de llaveros, otro de piruletas decorativas y por la tarde otro de colgantes. Hubo demostraciones de alfarería, de pelado de hoja de aloe vera y de grabado en vidrio.
Además, los visitantes pudieron participar en los huegos gigantes familiares en madera y ve e concurso de postres caseros.
Un espectáculo familiar de música y una sesión de teatro pusieron el colofón a la feria de San Antonio en su edición de 2017.