El programa “Vacaciones en paz”, organizado por la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui, ha traído a 23 niños a Salamanca con el fin de que disfruten de un verano de actividades y temperaturas más suaves. Este 2017 el programa cumple 20 años y son 22 las familias salmantinas que acogen a un niño durante este verano, 10 de ellas por primera vez. Aún no hay fecha fija para el viaje de vuelta a su tierra natal, pero la fecha rondará el 30 de agosto.
Para los 23 niños saharauis que participan en el programa “Vacaciones en paz”, Salamanca significa olvidarse de unas temperaturas que rondan los 45 grados, recibir atención sanitaria y divertirse chapoteando en el agua de la piscina. “A partir de este momento se integrarán en las actividades que haga la familia”, explicaba María Ángeles Giménez, presidenta de la Asociación.
Según el calendario de actividades planteado por la Asociación, en el mes de julio todos participarán en una visita al Ayuntamiento, después de la cual tendrán una revisión del oído en Gaes. Días más tarde, la Junta de Castilla y León tiene preparado un día de diversión en el parque acuático de Valencia de Don Juan (León). A estas actividades se suman un campamento en Aldeatejada, una comida en Rollán y una comida en el Telepizza. Aparte de esto, los pequeños asistirán a revisión pediátrica, al dentista y al oftalmólogo entre otros.
Este año se cumplen 20 años desde el inicio de este programa solidario, y, aunque se hayan perdido multitud de familias debido a la crisis económica, aún se mantiene en cifras similares a años anteriores. Pese a que es una iniciativa positiva para niños y familias, María Ángeles Giménez no puede evitar sentir tristeza. “Me produce muchísima tristeza que este programa exista”, ha manifestado, “yo lo que querría es poder ir a ver a estos niños a su tierra, que no estuviera ocupada y que fuera un país libre”.
Texto y fotos: Paula Castro Morán
