[dropcap]A[/dropcap]l recorrer el casco histórico de Salamanca es inevitable trasladarse al grandioso siglo XVI, centuria de importantes artistas y célebres pensadores. Pero no todo tiempo pasado fue mejor; también debemos estar preparados para “regresar al futuro”. Y para descubrir el arte del siglo XXI debemos callejear por el Barrio del Oeste.
Este barrio cuenta con más de 500 puertas de garaje. Aparentemente, nada especial. Pero, espera un momento…No son solo puertas, también son lienzos. Lienzos en los que artistas de todos los rincones pintan, trazan y colorean; lienzos en los que el barrio dice, grita y sueña.
Era un barrio gris que ha renacido como un museo de color. “Muchos artistas y estudiantes de Bellas Artes viven o piden vivir aquí. El arte tiene una vertiente funcional. La gente es más feliz”, cuenta Amor Díaz, vecina del barrio.”Creo que nuestro barrio se ha convertido en un museo. La sociedad pide esto”, agrega.
Pero además de arte, el Barrio del Oeste rebosa compromiso; el compromiso de los vecinos para con su barrio. “Colaboramos de muchas formas distintas, cada uno en la medida que puede: en los mercadillos, tejiendo, en la radio del barrio, difundiendo publicidad… También se realiza una importante labor social”, explica Julia Pareja, vecina del barrio desde hace más de 15 años.
“Hay vecinos que reniegan de lo que se está haciendo pero no pueden negar que se están abriendo negocios y creando puestos de trabajo”, matiza Pareja. “Me he enamorado del barrio, pero como cualquiera”. Tiene razón: es imposible pasear por el barrio sin quedar fascinados por el color y la energía que desprenden sus calles.
En el siglo XVI, los grandes mecenas impulsaron el talento de famosos artistas. Hoy, en el Barrio del Oeste, es el apoyo de los vecinos lo que promueve el arte y la cultura. Pero ahora, se trata de “arte a pie de calle, a pie de vida”. Arte para todos.
Por: Elena Vecillas Valdueza