La Universidad de Salamanca y la Asociación Atenea desarrollan un ambicioso proyecto que convertirá al Estudio salmantino en una referencia en el trabajo por la detección, la formación y la concienciación respecto a las altas capacidades intelectuales de niños y jóvenes.
En este sentido, desde la Usal ya se trabaja para coordinar grupos de investigación que aúnen especialistas e investigadores de la Universidad, de asociaciones y de entidades externas, con el objetivo de mejorar la detección e implementación de medidas que enriquezcan la educación de los niños y jóvenes con altas capacidades intelectuales.
Asimismo, y como señaló en el encuentro con los medios el vicerrector de Investigación, Juan Manuel Corchado, “la Universidad de Salamanca se encuentra identificado fuentes de financiación e infraestructuras para poner en marcha estas investigaciones, de forma que se creen mecanismos que involucren a centros de primaria, secundaria y universitarios, así como a diversas instituciones”.
Observatorio
El Vicerrectorado de Investigación y Transferencia ha creado el Observatorio de Altas Capacidades Intelectuales (http://galileo.usal.es), con el objetivo de acabar con las deficiencias en la detección, identificación y atención de las altas capacidades intelectuales. Gracias a esta iniciativa, la Usal y Atenea ofrecerán cursos, talleres y jornadas en las Facultades de la Universidad de Salamanca para mejorar la formación de los futuros profesores, maestros, psicólogos y orientadores escolares en el campo de la atención a este colectivo. Además, para ofrecer atención a los niños y adolescentes con altas capacidades intelectuales, así como a sus familias, se organizarán actividades en el marco del programa “Investigando en la Usal” y un proyecto de Mentorías.
Mediante estas acciones, la Universidad de Salamanca persigue convertirse en un referente tanto a la hora de detectar los casos de niños y jóvenes con altas capacidades intelectuales, como a la de implementar medidas y planes de formación especializados que permitan que estas personas se desarrollen académica y profesionalmente en el entorno de la USAL. De esta manera, toda la sociedad podrá beneficiarse de las capacidades y cualificación de estos niños y jóvenes que, hasta hace bien poco, “han estado invisibilizados en los planes de atención a la diversidad de los centros educativos”, como destacó Mª Dolores García Román.
