El Ayuntamiento de Salamanca homenajea a las turroneras de La Alberca con una escultura fundida en bronce a la cera perdida de grandes dimensiones del artista vallisoletano Gonzalo Coello Campos, autor de exposiciones en Madrid, Barcelona, Bilbao, Valladolid, París, Niza, Bruselas y en ciudades norteamericanas como Washington, Nueva York y Augusta.
La obra está ubicada en la Plaza del Mercado, frente a los soportales de San Antonio, donde estas comerciantes venden sus productos artesanales en el mes de diciembre desde hace más de un siglo.
Con unas dimensiones de más de 1,60 metros de alto y de 1,40 de ancho y un peso de 600 kilogramos aproximadamente, esta obra representa a una turronera del siglo XIX sentada sobre una caja de madera y una mesa panera en la que corta el turrón.
Esta tradición se ha mantenido de manera invariable de generación en generación por las turroneras albercanas, que continúan elaborando este dulce de forma artesanal.
Este conjunto escultórico se completa con otras dos piezas que representan a un carnicero y a una verdulera, esculpidas también por Gonzalo Coello Campos y que se han instalado en la Plaza del Museo de Comercio. Estas obras, que son, igualmente, de grandes dimensiones y de bronce fundido a la cera, muestran a estos profesionales en movimiento y tienen gran expresividad.
Con estas esculturas, que son las primeras de Gonzalo Coello que muestran las calles y plazas de la ciudad, «el Ayuntamiento de Salamanca ha pretendido rendir un homenaje al comercio tradicional tan importante en Salamanca».
Según explica el Ayuntamiento, «estas obras estaban incluidas en el proyecto de mejora de la Plaza del Mercado y no suponen un coste añadido para las arcas municipales».
Gonzalo Coello
Gonzalo Coello realizó estudios académicos y formación especializada en artes pláticas. Reivindica al escultor salmantino Venancio Blanco como uno de sus referentes y señala el expresionismo figurativo contemporáneo como su corriente.
Desde 1988 realiza exposiciones periódicas en Madrid, Barcelona, Bilbao y Valladolid. Ha expuesto también en Augusta, Washington, Nueva York, Bruselas, Niza y París.
Moldea escultura en bronce desde hace casi 20 años creando distintos diseños y colecciones numeradas, como sus toros, caballos, palomas, o personajes, ediciones numeradas en continua renovación.
Realiza murales cerámicos de gran formato en alto relieve. Cientos de murales decoran espacios públicos y privados, destacando en ámbito urbano la Plaza España de Valladolid (escenas del antiguo mercado, 1996).
Es autor, además, de trofeos y diseños para diversos certámenes y acontecimientos, como la Olimpiada Juvenil ’91 o la Vuelta Ciclista a España.