Denuncian las condiciones de la Policía Local de Santa Marta

Las organizaciones sindicales de CSIF, CCOO, UGT y SPPMCyL integrantes de la Junta de personal de funcionarios del Ayuntamiento de Santa Marta de Tormes han denunciado este jueves las condiciones de la Policía Local del municipio.

Destacan «la poca valoración del alcalde y equipo de Gobierno sobre los policías locales de Santa Marta de Tormes, siendo la que menor nivel de destino tiene en toda la provincia de Salamanca».

Aseguran que «la mitad de la actual plantilla de agentes de Policía, ante las precarias condiciones de trabajo, ha solicitado la participación en las oposiciones a Policía en Salamanca».

Explican en su escrito que «alcaldes del mismo Partido Popular, como el de Béjar en el mes de diciembre, han manifestado públicamente las penosas condiciones de la plantilla en Santa Marta de Tormes».

Explican que «desde hace siete años no se cubren las plazas de agente que se han quedado vacantes, desconociendo donde ha ido ese dinero».

Además, indican que «los vehículos policiales propios tienen más de 9 años de antigüedad, siendo la mitad superior a los 15 años. Los vehículos actuales no cumplen las medidas de seguridad mecánicas ni de protección para la salud de los policías. En el año 2015 se asignaron 92.000 euros para adquirir dos vehículos y desde entonces en todos los años se ha asignado presupuesto para adquisición de vehículos, desconocemos donde ha ido ese dinero. En 2017 se ha publicitado en dos ocasiones la adquisición de vehículos quedando en sólo palabras», precisan.

Entre sus quejas incluyen que «desde hace más de cuatro años no se renueva el vestuario de uniformidad, aunque todos los años incluyen partida presupuestaria para ello, desconocemos donde ha ido ese dinero».

El puesto de Jefe está siendo ocupado desde hace cuatro años en comisión de servicios por policías de fuera «al no considerar como válidos a ninguno de los que forman la actual plantilla al exigir unos requisitos imposibles para poder promocionar. Por el contrario a los de fuera se les exige menos de la mitad que a los propios policías», denuncian.

Por último, señalan que «la salud de los policías se está viendo afectada por los abusos marcados como necesidades del servicio, los turnos de trabajo y el aumento de competencias que ya han tenido que asumir y que no están siendo valoradas pues el convenio laboral data del año 2002, donde las cantidades aún figuraban en pesetas».