Los magistrados del Tribunal Supremo han decidido mantener en prisión incondicional a Oriol Junqueras por considerar que el exvicepresidente de la Generalitat incitó a la violencia y asegura que su único propósito es volver a impulsar la independencia de Cataluña.
El fallo que rechaza el recurso de apelación de sus abogados indica que existen indicios de la comisión por parte de Junqueras de delitos de rebelión, sedición y malversación de fondos públicos.
Además, creen que “existe un riesgo relevante de reiteración delictiva al no existir ningún dato que permita entender que el recurrente tiene la intención de abandonar la vía seguida hasta ahora».
Consideran los magistrados que cualquiera puede defender ideas que propongan incluso la eliminación de la Constitución que avala esa libertad de expresión, pero que eso debería hacerse «sin cometer delito alguno», que es lo que se le atribuye a él y al resto de encausados por la algarabía secesionista.
La resolución explica que Junqueras, desde la vicepresidencia de Generalitat, participó en un plan de declaración unilateral de independencia en contra de las resoluciones del Tribunal Constitucional, y alzándose contra el Estado español, contra la Constitución, contra el Estatuto de Autonomía y contra el resto del ordenamiento jurídico”.
Oriol Junqueras lleva dos meses en la prisión madrileña de Estremera donde continuará tras esta decisión del Supremo.