El número 1 del póker es español y se llama Adrián Mateos. Tiene solo 23 años y ya ha sido nombrado el mejor jugador de póker del mundo por el Global Poker Index. Se trata de un joven del municipio madrileño de San Martín de la Vega que destaca por su sencillez y que se aleja del tópico del oscuro y elegante jugador, según informa El Mundo.
El póker ha permanecido en el imaginario colectivo como un juego de cartas clandestino en el que abundan el alcohol y el dinero, pero Adrián Mateos explica que “no es como lo pinta la televisión”.
De hecho, en lo más alto del mundo del póker se encuentran otros jóvenes como él, de entre 25 y 35 años, inteligentes y con estudios. Los profesionales no son grandes estafadores sino personas expertas en matemáticas y materias similares.
Adrián Mateos empezó con este juego a los 16 años y en sus dos primeros grandes torneos ya se embolsó 130.000 euros. Fue entonces, cuando cumplió los 18, cuando decidió abandonar sus estudios en economía para mudarse a Londres a abrirse camino como profesional del póker.
Mateos ha señalado que se trata de un juego en el que, a corto plazo, “puede ganar cualquiera”, pero que “a largo plazo triunfan los mejores, los que más estudian y los que más horas le echan”.