El Ayuntamiento de Valencia ha cancelado la exposición artística de Carles Recio, el funcionario despedido después de pasar 10 años sin ir a trabajar, tras descubrir que había utilizado una identidad falsa para ocultar su nombre y el contenido de la muestra: un homenaje a sí mismo.
La inauguración estaba prevista para este miércoles, pero ha quedado suspendida y, por tanto, la muestra no verá la luz.
Su título era Amor a Valencia. Los trabajos de un hombre que nunca trabajó y, según informa El País, estaba compuesta por un conjunto de cuadros -algunos subidos de tono-, esculturas de carácter religioso, placas y diplomas a través de los cuales el exfuncionario quería presumir de la fama adquirida por no haber trabajado durante una década y haber seguido cobrando del erario público.
Este tributo a sí mismo tenía toques megalómanos. La exposición incluía un busto y un cuadro con su retrato, además de diplomas que le agradecen su labor en tareas como «mantenedor de las fiestas de Albal» y «capitán moro en la comparsa Berberisco de Crevillent».