Basudeb Tappo, un agricultor de una aldea de La India de 28 años, se casó con su prometida, una joven de 24 años, el pasado día 4 de marzo. El enlace tuvo lugar en la aldea de Palmara, en el estado indio de Odisha, donde ambos residían, y se debía a un acuerdo matrimonial entre las familias de los dos jóvenes. La boda fue tradicional y ambos recibieron las bendiciones de sus familiares y amigos.
Lo que sus familias no se imaginaban era que no todo era lo que parecía. Al séptimo día de celebrar la ceremonia, los vecinos del lugar se percataron de la presencia de tres desconocidos en la casa de los recién casados. Creyendo que se trataba de unos ladrones, les golpearon, hasta que la novia apareció y confesó que, en realidad, era su pareja.
Las familias indias son muy tradicionales y tienen sus propias normas. En su caso, sus padres no le habían permitido casarse con su novio y acordaron que contraería matrimonio con Tappo. Ella aceptó aparentemente, pero siguió viendo a su amado en secreto.
Tras descubrir este hecho, Tappo no reaccionó de la manera en que se esperaba de un joven tradicional de la India rural, sino que decidió proponer que su esposa y el amante de ella se casaran también, entendiendo que la vida de las tres personas podría ser desgraciada si no lo hacían. Tanto la novia como sus familias se mostraron, curiosamente, de acuerdo con la decisión. “Nunca olvidaré su gesto”, declaró ella.