El Hospital de Alzira, cuya gestión ha sido privada hasta ahora por decisión del PP, recupera la gestión pública. A partir de este 1 de abril, el centro sanitario volverá a depender de la Conselleria de Sanidad de la Comunitat Valenciana para cumplir el compromiso del ‘Pacte del Botànic’ acordado por PSPV-PSOE y Compromís con el apoyo parlamentario de Podemos.
Este modelo privado tuvo su origen en 1997 tras firmar el contrato de gestión de servicios públicos con la UTE Ribera Salud. El de Alzira se convirtió en el primer hospital público de gestión privada de España, un modelo que luego se extendería por el PP a las comunidades que gobernaba. La concesión iba a ser por un periodo de 10 años y abarcaba todo el área de la Ribera.
Entró en vigor el 1 de enero de 1999, pero no duró mucho debido a la perdida de cinco millones de euros de la UTE en los cuatro primeros años. Ambas partes decidieron cancelarlo en 2002. Sin embargo, lejos de dar marcha atrás, el modelo de gestión privada se amplió y encareció. Como maniobra de rescate, el Consell compró las instalaciones del hospital de La Ribera por 43,9 millones de euros, a lo que se añadieron 26,3 millones de “lucro cesante”.
Cuando se volvió a sacar la licitación, esta incluía también la gestión de los centros de salud y un aumento del 68% del canon anual que la Administración pagaba a la empresa por habitante, pasando de 225 a 379 euros por habitante. Actualmente, la cifra está en 777. Fue la misma UTE quien ganó el concurso, firmando un contrato de 15 años prorrogables que entró en vigor el 1 de abril de 2003.
Este año finaliza ese plazo de 15 años. Carmen Montón, consellera de Sanidad, y Ximo Puig, presidente del Consell, anunciaron que el contrato no se va a prorrogar, comenzando así la vuelta a la gestión pública. Esta decisión no ha estado exenta de recursos judiciales por parte de Ribera Salud. Del mismo modo, anunciaron su intención de recuperar el resto de hospitales privatizados por el PP cuando sus contratos finalicen. Estos hospitales son los de Torrevieja, Dénia, Manises y Elche.
Según las cuentas, el gasto de este hospital asciende a 2.104,9 millones de euros (desde abril de 2003), cifra a la que hay que sumar el gasto de farmacia, prótesis, oxigenoterapia y transporte sanitario. Aún queda hacer la liquidación de años anteriores y la Generalitat reclama 105 millones de euros, aunque la empresa solo reconoce una deuda de 50 millones.