El Guijuelo se verá a abocado a luchar por salvar la categoría en el tramo final de la competición.
Este sábado encadenó ante el Valladolid Promesas su quinta derrota consecutiva, con nueva polémica arbitral incluida, lo que le deja involucrado ya en la lucha por evitar el descenso, al quedarse a cuatro puntos de la línea roja.
Un gol desde fuera del área de Antonio Domínguez en el minuto 74 ha dejado a los chacineros en observación, a expensas de ver qué hace las dos próximas jornadas, dos finales en las que se enfrentará con dos equipos en puestos de descenso, el Pontevedra y la Segoviana.
Esas dos citas marcarán el futuro del Guijuelo esta temporada y quizá el de las venideras.
Son cinco derrotas consecutivas, casi todas por la mínima, pero cinco partidos en los que ha encajado siete goles y no ha sido capaz de marcar ni un solo tanto.
Este sábado el Guijuelo jugó bien hasta que en el minuto 35 se quedó en inferioridad por la expulsión de Nacho por una entrada a un rival. El técnico, Jordi Fabregat, también fue expulsado por realizar unos comentarios sobre una entrada a Luque que era de tarjeta amarilla y el árbitro ni siquiera pitó falta.
Fabregat rajó al finalizar el partido del arbitraje, por considera que cuando el árbitro tenía alguna duda siempre se decantaba por la decisión “más adversa” para el Guijuelo. Dijo que no parece casualidad que haya dos equipos gallegos en problemas y que los árbitros gallegos que ha tenido el Guijuelo en las últimas jornadas lo han dejado en inferioridad.
