Un total de 362 municipios de Salamanca, pertenecientes a 22 agrupaciones de Paz, dejarán de prestar el servicio de Registro Civil, si se aplica la reforma prevista por Justicia. Asimismo, unos 60 funcionarios pueden verse afectados en la provincia. En Castilla y León, el número de municipios que nos contarían con el servicio de Registro Civil suman 2.250 (en 154 agrupaciones de Paz), y los funcionarios afectados alcanzan los 500.
La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI-F) pide e insta a los ayuntamientos que presenten mociones de apoyo al mantenimiento del Registro Civil, que desaparecerá si, finalmente, sus competencias pasan a los registradores de lo Mercantil, y se aplica la reforma planteada por Justicia.
El sindicato independiente remitió semanas atrás una carta a los alcaldes, para animar a presentar esas mociones, y recuerda que unos 500 funcionarios de Castilla y León pueden verse afectados por la privatización del Registro Civil. Además, desaparecería el servicio que ahora se ofrece en 2.250 municipios de Castilla y León, a través de 154 agrupaciones de paz, de acuerdo con la reforma aprobada.
Rechazo a la privatización
El sindicato CSI-F, mayoritario en el sector de Justicia, y que viene expresando desde hace meses su rotundo rechazo a la privatización del Registro Civil, con concentraciones y recogida de firmas, insiste en destacar “la importancia de que que sean las propias corporaciones las que exijan la continuidad de los registros civiles, por tratarse de un servicio básico, próximo al ciudadano y que debe ser público.
Aunque algún municipio ya ha aprobado la moción solicitada, CSI-F remarca que “resulta clave que todos los ayuntamientos expresen con claridad su deseo de que el Registro Civil siga ofreciendo su servicio. Es importante que los ayuntamientos defiendan el actual modelo de los registros civiles, dependientes del Ministerio de Justicia”, remarca la responsable autonómica del sector de Justicia de CSI-F Castilla y León, María Jesús Zamorano.
La huelga
En el mes de septiembre, el sindicato independiente CSI-F continuará con diversas movilizaciones y actuaciones para defender la continuidad del Registro Civil, que se conocerán más adelante, para terminar -previsiblemente-, con una huelga en los registros civiles de España, que se convocará con otros sindicatos.
CSI-F también está en conversaciones con el colectivo de trabajadores dependientes de los registros mercantiles y de la propiedad, que se ven afectados también por el proceso de fusión de registros que planea el Ministerio de Justicia, para que se sumen a las protestas y de esta manera promover una movilización global en los registros civiles y mercantiles de toda España.
Por otra parte, CSI-F teme que la privatización del Registro Civil afectará a la gratuidad del servicio público, “aunque en este momento el Ministerio lo niegue. Posiblemente, se establecerán futuros aranceles que recaerán en los bolsillos de los ciudadanos”.